Junto a su hijo de un año, el marido y la suegra la mantenían encerrada, amenazada e incomunicada.
Según difundieron fuentes policiales, la mujer pudo realizar a escondidas una llamada vía Zoom con su familia y allí quedaron grabados de casualidad los maltratos a los que era sometida. La familia se contactó de inmediato con la Embajada mexicana en la Argentina para alertar a las autoridades por la situación.
A partir de ahí, tras el pedido de la fiscal María Soledad Garibaldi, titular de Unidad Fiscal de Instrucción Número 8, la Policía realizó un allanamiento.
Al ingresar a la casa los efectivos encontraron a la joven junto a su hijo de un año, que tuvo con su captor, que manifestó estar viviendo un “calvario”. Su pareja, un hombre de 36 años y su suegra de 64 no la dejaban salir de la casa. La mujer también expresó que era víctima de maltratos físicos, la amenazaban y le pegaban para que no se escapara.
El operativo estuvo encabezado por efectivos policiales del Grupo Táctico Operativo y la DDI de Avellaneda-Lanús.
La causa fue caratulada como “lesiones, privación ilegítima de la libertad y amenazas coactivas en el marco de violencia de género”.