Una joven recibió un disparo que la dejó paralítica durante un asalto en su casa de Villa Carmela, Tucumán, pero su confesión dio una vuelta a la causa: el que ejecutó el arma fue su novio pero por error y no el ladrón, quien se encuentra detenido.
Los relatos que pudo expresar Sofía Agustina Villagrán en un sanatorio privado de la Ciudad de Buenos Aires, en donde se recupera, generaron una conmoción en la prensa local.
De acuerdo a lo detallado por el medio La Gaceta, el 17 de mayo la chica estaba en el domicilio junto a la pareja Mauricio Díaz cuando decidieron pedir una pizza para cenar esa noche.
Al momento de llegar el delivery, proveniente de un negocio de su barrio, el Oeste III, ubicado al noroeste de la capital tucumana, el novio abrió la puerta y se acercaron dos motochorros, que amenazaron al empleado y a él.
“Ella estaba en la casa de su novio, Mauricio Díaz. Pidieron una pizza y cuando llegó el joven delivery, fue abordado por dos motochorros. Sofía salió al balcón y comenzó a gritar”, explicó el padre de la muchacha, Eduardo Villagrán, al diario.
Hasta ese momento lo detallado a la policía fue que un asaltante atacaba al empleado y al novio cuando levantó la pistola y disparó el balazo que ingresó por la clavícula y le destrozó la médula espinal a la joven.
Pero lo descripto en los documentos policiales por el novio y el delivery cambió meses después, con las palabras de Sofía.
“La que salió a buscar la comida fue la madre de Díaz. Según lo confesó después, el chico sacó un arma de un cajón, fue corriendo hasta el balcón donde estaba mi hija para evitar el asalto, pero tropezó con la cama y allí salió el disparo”, manifestó el papá de la pareja.
La joven nunca supo quién le disparó porque estaba de espaldas y quedó inconciente.
Sin embargo, la chica no realizó denuncias, aunque en todo momento lo nombró como su ex, quien podría ser acusado del delito de lesiones culposas con dolo eventual.
Por otro lado, el ladrón que asaltó al delívery es conocido como El Dientudo y está detenido.