Policiales |
3'
El fallo del Tribunal Oral Criminal Nº 10 de Lomas de Zamora recayó sobre Jonathan Talavera, de 27 años, quien fue hallado culpable del crimen de Ricardo Rodríguez (16), en un hecho ocurrido en setiembre de 2012 en Ingeniero Budge.
Un joven fue condenado a prisión perpetua por haber ejecutado de un balazo en la cabeza a un adolescente, en un hecho que fue atribuido a una venganza por celos, debido a que la víctima habría pretendido vincularse sentimentalmente con la novia de un amigo del asesino. El fallo del Tribunal Oral Criminal Nro. 10 de Lomas de Zamora recayó sobre Jonathan Talavera, de 27 años, quien fue hallado culpable del crimen de Ricardo Rodríguez (16), en un hecho ocurrido en septiembre de 2012 en una esquina de la localidad de Ingeniero Budge. El veredicto fue coincidente con el pedido de pena que había formulado la fiscal de juicio Mariana Monti, al considerar al imputado como autor penalmente responsable del delito de “homicidio agravado”, por el uso de arma de fuego y premeditado con la actuación de dos o más personas, aunque esta proceso arribó detenido uno solo de los acusados, sindicado como el autor material del disparo mortal.
La investigación permitió establecer que “el móvil del crimen fue una venganza, ya que la víctima habría intentado involucrarse sentimentalmente con una amiga del acusado”, de acuerdo a lo indicado por el portal de noticias DiarioConurbano.com.ar, en relación al caso en el que se condenó a perpetua a Talavera por el asesinato del chico Rodríguez, registrado en horas de la noche del 6 de septiembre de 2012 en el cruce de las calles Blandengues y Otto Krause de Ingeniero Budge. Tras el debate, se dio por probado que el imputado, junto a otros tres jóvenes, emboscaron a la víctima, en momentos en que circulaba con su moto. Si bien luego de cruzar una serie de insultos, desde el grupo abrieron fuego contra el adolescente. No obstante, según la fiscal Monti, el que le disparó directamente a la cabeza a Ricardo Rodríguez fue Jonathan Talavera.
“Al parecer, el chico se había querido involucrar con la novia de uno de los amigos de Talavera que estaba ese día del ataque en el lugar. Los otros participantes de la agresión no fue detenidos y solo el acusado fue apresado, llegándose a este juicio, en el que resultó condenado a perpetua”, se indicó. Sobre el desarrollo del proceso, se destacó que muchos de los testigos, vecinos de esta zona de Ingeniero Budge donde ocurrió el asesinato, lograron vencer el temor y declarar sobre lo sucedido, cuando los cómplices de Talavera en el homicidio de Ricardo Rodríguez se encuentran en libertad y habrían amenazado con tomar represalias, contra aquellas personas que se “animaran” a brindar su testimonio.