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El cuerpo fue encontrado sobre la calle Costanera y Otamendi, en Quilmes, por un recolector de metales. El hombre estaba tirado boca abajo con sus manos atadas.
El cadáver de un hombre con las manos atadas con una soga fue encontrado por un vecino que buscaba metales en la Costanera de Quilmes, informaron este sábado fuentes policiales.
El cuerpo fue encontrado sobre la calle Costanera y Otamendi, donde un recolector de metales observó al hombre tirado boca abajo con sus manos atadas a la altura de la cintura con una soga.
La fiscal Karina Gallo de la Unidad de Instrucción Funcional (UFI) 2, quien con peritos revisó los bolsillos de la víctima, encontró un DNI a nombre de Pablo Jorge Barrio, mayor de edad con domicilio en la localidad bonaerense de Claypole.
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La fiscal ordenó que el cuerpo sea llevado a la morgue policial para la correspondiente autopsia para saber las causas de muerte.
Antecedentes
El 28 de marzo pasado, en una playa al Sur de la ciudad balnearia de Miramar, en el municipio bonaerense de General Alvarado, se encontró un cuerpo decapitado y desmembrado por la fauna marina y en avanzado estado de descomposición.
Según el resultado preliminar de la autopsia, se trataba de un hombre de entre 50 y 65 años y de, aproximadamente, 1,65 metros de altura que no presentaba signos de violencia.
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El examen forense se practicó en la Morgue Judicial de Mar del Plata por orden de fiscal Ana María Caro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción descentralizada, que es quien lidera la investigación.
Se estimó que el cuerpo estuvo entre tres y cuatro meses en el agua, lejos de la costa, ya que las partes faltantes -la cabeza, un brazo y un pie- fueron producto de la acción de la fauna marina depredadora presente en aguas más profundas.
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