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Después de haber sido privada de su libertad, violada y golpeada -agresión que le hizo perder un embarazo-, Ana María Rinaldi fue amenazada de muerte con pintadas en la puerta de su casa. “No tengo paz”, afirma desconsolada.
"Retirá la denuncia o estás muerta”. El mensaje intimidante fue pintado por desconocidos en la puerta del domicilio de una víctima de violencia de género en la zona de Lanús Oeste. Si bien el episodio fue denunciado, se suma a otros anteriores, con amenazas y persecuciones, de parte de una ex pareja de la mujer. Si bien, luego de la insistencia ante los investigadores del caso por el carácter violento de este sujeto, el hombre fue detenido y procesado con prisión preventiva, este nuevo hecho pone otra señal de alarma en esta situación que la joven viene padeciendo desde que fue privada de su libertad, abusada sexualmente y golpeada hasta hacerle perder el embarazo cuando cursaba su cuarto mes.
Ana María Rinaldi dice “no tener paz” y ni siquiera que Fernando Galante, un taxista de 43 años y que fue su novio durante 10 meses, se encuentre preso le genera cierta tranquilidad. El pasado jueves, en las primeras horas de la tarde, el portón negro de la casa en la que reside con sus padres fue vandalizado con una leyenda que la tiene como destinataria, sin que ninguno de los vecinos haya observado quien fue el autor de ese ataque anónimo. “Sin dudas, alguien de su entorno o que mandaron vino hasta mi casa, dejó la amenazada pintada en la puerta y escapó. ‘Retira la denuncia o estas muerta’, dice la amenaza y de inmediato me dirigí a la Comisaría de la Mujer y la Familia de Lanús para dejar constancia de lo sucedido”, contó a DIARIO POPULAR.
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Esto sucede en momentos en que el juez de Garantías de San Martín, Alberto Brizuela, debe decidir sobre la ratificación de la prisión preventiva del acusado o sí se prospera una pedido de excarcelación que presentó su defensa. La visibilización del caso y la insistencia de la víctima, asistida por el abogado Facundo Ferro, habían logrado torcer la marcha de la investigación, a cargo del fiscal Mario Marini, quien había adoptado una serie de medidas, como la restricción de acercamiento, que fueron burladas sistemáticamente. “Todas las pruebas que aporte fueron contundentes, además de las declaraciones de los testigos y parecía que nada alcanzaba. Hasta que lo indagaron y se tomó la decisión de detenerlo, pero ahora aparece esto y el miedo se vuelve instalar en mi, en toda mi familia. Ya son muchos avisos y esto no para”, expresó Ana María Rinaldi.
“Abuso sexual con acceso carnal, lesiones y amenazas” es la denominación de la carátula del expediente en el que está acusado este hombre y esta intimidación, si bien anónima, se adjuntará en la causa, al mismo tiempo que se solicitará que se coloque una custodia, ya que el botón antipánico no ha resultado útil cuando este mujer tuvo que afrontar episodios anteriores en los que fue insultada y acosada por Galante, al que denunció en varias oportunidades.
Todo se remonta a febrero de 2017, cuando se inició la relación de esta pareja, pero a los pocos meses empezaron los problemas que de escenas de celos pasaron a ser persecuciones, insultos y finalmente, golpes. Ya estando embarazada, Ana María Rinaldi fue agredida de manera brutal y eso derivó en que perdiera su bebe, en un contexto de violencia que le puso fin al corto noviazgo en noviembre del año pasado. De todas maneras, a fines del último mes de enero, la mujer fue interceptada por este sujeto al salir de su casa en Lanús, quien la llevó por la fuerza hacia su domicilio en la zona de San Martín, donde la retuvo por varias horas, para violarla y volver a someterla a una paliza.
Con todas las denuncias presentadas y mientras la investigación no prosperaba en acciones concretos, la víctima continuó siendo objeto de intimidaciones y amenazas, con “visitas” a su lugar de trabajo y mensajes a través de las redes sociales.