El presidente Mauricio Macri sostuvo que hay sectores que quieren desestabilizarlo, que “el kirchnerismo sistemáticamente pone palos en la rueda”, y cuestionó la huelga docente, la movilización de la CGT y el paro general que anunció la central sindical.
El jefe de Estado también hizo una autocrítica sobre el manejo del acuerdo firmado entre el gobierno nacional y el Grupo Macri por el Correo Argentino SA, el caso de los Panamá Papers, la aerolínea Avianca y la polémica surgida con Gustavo Arribas, titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), en una entrevista que emitió anoche América TV, en el programa del periodista Luis Majul.
Al ser consultado sobre si cree que hay sectores que quieren desestabilizarlo, Macri respondió “Sí, claramente”, e hizo hincapié en los sectores que “se sienten jaqueados”.
“Los cambios incomodan. Hay gente de buena fe a la que no le han cumplido, le han mentido y los cambios que generamos le incomodan”, dijo el Presidente en referencia a los problemas que ciertas políticas económicas, como la suba de tarifas, trajeron a la gente.
“Pero están los otros, esos a los que el cambio no les conviene porque a ellos les ha ido bien. Son las corporaciones y la dirigencia que con los incumplimientos, las obras que no hicieron, les ha ido bien”, remarcó enfático Macri, sin dar más detalles.
Sobre la posibilidad de que sea la ex presidenta Cristina Kirchner quién esté detrás del intento de desestabilización, Macri respondió: “No voy a hacer semejante nivel de acusación”, aunque advirtió: “Me queda claro que el kirchnerismo sistemáticamente pone palos en la rueda a todo lo que estamos haciendo”.
Luego, al ser indagado si adjudicaba la intención de desestabilización al docente Roberto Baradel, Macri se limitó a decir: “Es parte del kirchnerismo, es parte del kirchnerismo... Valoro muchísimo a los docentes. El problema acá es que un sector del gremialismo docente no hace ningún nivel de autocrítica”.
“Estos gremios lograron que se privatice la educación pública argentina”, sentenció Macri. “Los docentes deben ganar más, otro tema es la inflación y otro lo que cada provincia puede pagarle al docente”, sostuvo.
“Hay que sentarse en una mesa a dialogar, pero con los chicos en clase”, aconsejó.
El Presidente afirmó que “yo no cambié, soy el mismo. Dios me dio la posibilidad de renacer en el 2001. Primero en Boca Juniors, donde gané 16 campeonatos y lo dejé con 200 millones de pesos para el estadio. Después en la Ciudad, donde hice una revolución de obras y no tengo ni una denuncia de corrupción. ¿Qué pasa ahora que en un año tengo denuncia tras denuncia?rdquo;, se preguntó.
Sobre su socia política Elisa Carrió, el jefe de Estado reconoció que en muchas cosas que ella dice “no estoy de acuerdo, ni con lo de mi primo (Jorge Macri, intendente de Vicente López) ni con (Ricardo) Lorenzetti (titular de la Corte Suprema) ni con lo de (Daniel) Angelici, pero ella estaba en política desde antes. Mientras yo estaba en Boca, ella ya estaba en política. No la voy a cambiar ahora, convivo con ella, solo que a veces dice cosas que yo no comparto”.
También descartó cualquier posible cambio en su gabinete en el corto plazo y sobre otro aliado político, el radical Ernesto Sanz, dijo que integra la mesa de discusión de su gobierno, pero descartó sumarlo como funcionario de su administración.
En cuanto a la Procuradora General, Alejandra Gils Carbó, reconoció que “desde el primer día que asumí quiero que se vaya. Ella no es procuradora, es una militante política”.