Los cruces entre los distintos integrantes del Frente de Todos parecen no tener fin. Mientras en Juntos por el Cambio intentan mostrar una imagen de unidad y de cerrar filas, en la coalición gobernante el fuego cruzado no descansa. “Me da la sensación que no hay una preocupación central en ganar las elecciones”, lanzó Andrés “Cuervo” Larroque. Y la interna se encendió otra vez.
El dardo apuntó directo al presidente Alberto Fernández quien, por ahora, no ensayó ninguna respuesta directa ni verbal ni simbólica. “A veces me da la sensación de que esta obsesión por ocuparse de la parte y no del todo, del rol importante que tiene el Presidente, me da la sensación de que quizás no hay una preocupación central por ganar las elecciones”, dijo el referente de La Cámpora.
En seguida, Larroque aclaró que “lo importante es resolver hoy los problemas de la gente, pero también tenemos que ver cuál es la estrategia para que no vuelva lo que ya vivió la Argentina con el gobierno de Mauricio Macri”. Y, una vez más, arremetió contra Alberto Fernández: “Lo veo más preocupado por la parte que por la armonización del conjunto y mucha atención a jugadas muy chiquitas, muy de los cercanos, de los amigos”.
El ministro de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires aprovechó para dejar en claro —una vez más— que responde directamente a Cristina Fernández de Kirchner. “Cuando a uno se le da una responsabilidad, obviamente validada por el pueblo argentino, pero fue Cristina quien hizo la propuesta, me parece que uno tiene que ser consciente de la responsabilidad que tiene que desarrollar", dijo refiriéndose al Presidente.
Alberto Fernández no hizo declaración alguna después de la entrevista radial que dio Larroque. Tras la embestida que había sufrido días antes de parte de Máximo Kirchner, el presidente había respondido a pura gestualidad: el lunes recibió en la Casa Rosada a un grupo de intendentes del primer y tercer cordón del conurbano bonaerense junto a Sergio Massa y Juan Manzur. Se mostró rodeado por los líderes locales, quienes le pidieron fondos extras para poder pagar un bono a fin de año, un pedido que ya le había hecho Cristina Kirchner al Gobierno en el acto de la UOM el viernes pasado en la localidad de Pilar.
Cristina planea volver a hablar pronto. Será el jueves 17 de noviembre —Día de la Militancia— cuando se cumplan 50 años del regreso de Juan Domingo Perón al país tras 18 años en el exilio. Ese día, la vicepresidenta será la única oradora en el Estadio Unico de La Plata, donde La Cámpora y el sindicalismo cercano al kirchnerismo duro convocarán a la militancia.
“Como en el regreso de Perón, que revalidó su gestión como Presidente, tenemos que revalidar la etapa kirchnerista”, dijo el Cuervo Larroque, uno de los encargados de motorizar la convocatoria al acto del 17 de noviembre.
Para el dirigente camporista es importante definir la estrategia antes de hablar de candidaturas: “Si creen que Cristina va a venir a salvarles las papas a alguien, no; para eso, no”. Y aclaró que ”si hay un consenso respecto a la democracia, sobre cuáles son los desafíos en materia económica, ella dice que está dispuesta a hacer lo que haya que hacer; se hace cargo de lo que ocurrió en 2019 y se involucra en la solución”. Dejó así la puerta abierta tanto a una posible candidatura de Cristina como a un aporte de la vicepresidenta desde un lugar de armadora o de gran electora.
Lo que sí dejó en claro es que el cristinismo duro está dispuesto a presionar a Alberto Fernández sin disimulo, abiertamente. “Tenemos que amigarnos, le recomiendo al Presidente que se amigue con el liderazgo de Cristina, que no esté enojado si lo nombran mas o menos. Es entender que en la fuerza hay un liderazgo”, dijo Larroque. Y una vez más la interna se encendió en el Frente de Todos.