El juez federal Claudio Bonadio procesó con prisión preventiva y el arresto domiciliario del ex canciller Héctor Timerman por presunto encubrimiento de ciudadanos iraníes involucrados en el atentado a la AMIA.
El beneficio de que cumpla la condena en su domicilio es por su grave estado de salud. El ex funcionario kirchnerista se encontraba en Nueva york, donde realiza un complejo tratamiento contra el cáncer.
A su vez, Bonadio dictó falta de mérito al ex secretario privado de Timerman, Luciano Tanto Clement, y su asistente Alberto Mercado, al igual que del embajador Alberto D'Alotto y de la ex funcionaria de Cancillería Susana Ruiz Cerutti.
Graciana Peñafort, la abogada de Timernan, manifestó, en declaraciones a radio FM Delta desde la casa del ex funcionario, que “es una crueldad lo que están haciendo”, ya que su cliente “está muy enfermo”.
"No hay bases sólidas sobre las cuales pedir la preventiva ni para la ex presidenta ni para él”, consideró la abogada.
En el mismo sentido, se pronunció el dirigente Leopoldo Moreau, quien consideró que "estamos en el final de la persecución política del gobierno" y atribuyó las detenciones ordenadas por Bonadio a "una campaña de humo para tapar las medidas económicas del gobierno, como el aumento tarifario".