U n profesor de inglés que hace 15 días había sido secuestrado por delincuentes cuando salió de una escuela del partido bonaerense de Merlo reconoció a los captores y aseguró que se equivocaron de víctima cuando lo dejaron atado de pies y manos en un campo de Marcos Paz.
Fuentes judiciales informaron que se trata del docente Matías Vélez (33), quien fue llevado cautivo luego de salir de dar clases en la Escuela Primaria y de Educación Media 68, de Mariano Acosta, Merlo.
Durante una rueda de reconocimiento efectuada con los detenidos por orden del fiscal de Morón Sergio Dileo, la víctima pudo identificar a sus captores “a simple vista y sin dudar un segundo”, remarcó el vocero.
Vélez también declaró que cuando los secuestradores lo interceptaron le pedían una suma cercana a los 150.000 pesos y que él les explicaba que nunca tuvo esa cantidad de dinero.
También se determinó, en base a la declaración de testigos, que los captores se equivocaron de víctima “porque al que querían llevarse era a un quintero que tiene un campo en Marcos Paz y que lleva a su hijo a la misma escuela en la que da clases Vélez”, indicó la fuente.
Agregó que el quintero tiene un auto similar al del profesor y que los delincuentes tenían el dato de que iba a pagar una importante suma de dinero por la compra de un tractor para su campo y por eso lo querían secuestrar.
En tanto, Dileo tiene previsto el martes próximo ampliarles la indagatoria a los dos detenidos por el caso, pero en relación al robo de una moto que fue utilizada en el secuestro y decomisada cuando se capturó a los sospechosos.
En tanto, se dispuso la libertad de un adolescente de 15 años que había sido detenido inicialmente por el secuestro, ya que por su edad es inimputable.
El hecho ocurrió el 16 de noviembre a las 17 en inmediaciones de la escuela ubicada en Iberá 3950 de Mariano Acosta.
Cabe señalar que con ayuda del perro Bruno, de la Delegación de la Policía Científica de Merlo, los pesquisas lograr encontrar al docente en una zona descampada de Marcos Paz, cerca de un camino de tierra intransitable. La fiscalía caratuló el hecho como “privación de ilegal de la libertad, abandono de persona, robo calificado en poblado y en banda, hallazgo de automotor y tenencia de arma de guerra”.