Diario Popular tuvo la oportunidad de probar el Smartphone sucesor del Moto X y en primera instancia podemos asegurar que es un equipo más que interesante para aquellos que no se andan con chiquitas, debido a su pantalla 5,7 pulgadas y resolución QHD (2560 x 1440 pixeles, 520 ppp).
No es una novedad que las personas utilicen estos dispositivos móviles para interactuar mediantes redes sociales y aplicaciones de mensajería, dejando en segundo plano a las tradicionales llamadas, pero, aunque parezca una obviedad, hay que destacar que gracias a sus potentes parlantes y micrófono, este ítem está claramente aprobado.
Ojo, vale aclarar que el teléfono no tiene la culpa de la baja calidad de servicio que prestan las compañías del sector de comunicaciones, y los insultos que generaron las llamadas finalizadas anticipadamente por mala señal.
Cerrado este aspecto básico, podemos continuar hacia los demás ítems que podrían diferenciarlo de los aparatos de la misma gama de la competencia.
No queremos saturar al lector, pero es útil mencionar las características técnicas del producto: 3 GB de RAM, 32 GB de almacenamiento interno que se puede ampliar con una tarjeta microSD, Bluetooth 4.1 y su potente batería. En fin, es difícil que alguien vaya a encontrarse con problemas de rendimiento en este equipo, o en otro de hardware similar, pero vamos a centrar la review en dos aspectos destacables del producto: su cámara y su estética.
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Cabe destacar que Lenovo incluye también un protector de plástico transparente para proteger el borde del teléfono.
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Al tener la oportunidad de probarlas la principal -de 21 megapíxeles con apertura f/2.0, doble flash, enfoque por detección de fases (PDAF) y grabación de video en 4K-, claramente cumplió con las expectativas.
Además, la frontal está dotada con 5 megapíxeles y flash propio, debilidad para los amantes de las autofotos.