La leyenda del "abominable hombre de las nieves" atemorizó a varias generaciones, pero un grupo de científicos de la Universidad de Búfalo asegura que puso fin al popular misterio.
La investigación, publicada en la revista Proceeding of the Royal Society B, se basó en muestras de ADN de pelo, piel, huesos y excrementos del yeti que permitió revelar la verdad detrás de uno de los mitos más grandes de la historia de la humanidad.
Así, quien fuera conocido por años como el abominable hombre de las nieves y asustó a cientos de turistas por su silueta similar a la de un ser humano alto y cubierto en su totalidad por una exuberante cabellera, no sería más que un oso.
"Nuestros hallazgos sugieren de manera sólida cómo los apuntalamientos biológicos de la leyenda del Yeti se pueden encontrar en los osos de la zona, y nuestro estudio demuestra que la genética debería poder desentrañar otros misterios similares", indicó la responsable del equipo de investigación.