Mientras que en el Congreso Nacional se discute un proyecto para la despenalización terapéutica, una localidad bonaerense quiere ser pionera en la producción de cannabis para usos médicos. DIARIO POPULAR charló con la diputada Diana Conti, autora del proyecto para modificar la actual Ley de Drogas (N° 23.737); el intendente del pueblo de La Madrid, Martín Randazzo, donde se realiza el Primer Seminario Internacional de Cannabis Medicinal"; el Dr. Marcelo Morante, profesor de la UNLA, investigador y uno de los máximos referentes e impulsores del proyecto Cannabis Medicinal.; y el abogado Mariano Fusero, miembro de la Asociación Pensamiento Penal (APP).
¿Argentina le abre las puertas a la Cannabis Medicinal? Mientras que en España o Estados Unidos los apoyos estatales y legislativos a la marihuana medicinal datan de finales de los ochenta, en Latinoamérica comenzaron recién en los últimos años. Al margen de Uruguay, donde se encuentra totalmente regulada e incluso se estima que para fines de 2016 se vendería en farmacias, en Chile, México y Colombia desde 2015 cuentan con leyes que habilitan el uso terapéutico.

Si bien en la última época en Argentina hubo casos de usuarios medicinales que incluso llegaron a la Justicia, como el de Alejandro Cibotti (persona que vive con VIH que solicitó que se lo autorice al autocultivo o que el Estado le provea cannabis para calmar sus dolores), fue la historia de una beba de tres años que sufre encefalopatía epiléptica la que conmovió al país y abrió el debate.

Los padres de Josefina, María Laura Alasi y Fernando Vilumbrares, probaron todos los métodos posibles para tratar la grave enfermedad que sufre la nena. Hasta que a fines de 2015 el Gobierno, a través de la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), les autorizó la entrada legal a la Argentina de un aceite hecho a base de marihuana.

A finales de marzo, la diputada Diana Conti del FPV junto a representantes de otros bloques opositores, presentaron un proyecto para modificar la actual Ley de Drogas (N° 23.737). El mismo considera "legítimo" y "autorizado" el consumo, tenencia y producción de la planta de Cannabis Sativa con fines terapéuticos o para la investigación de su posible eficiencia como medicación, el control de síntomas o cuidados paliativos.

"Los hechos concretos de los casos de estos chicos con epilepsia donde el aceite cannábico mejora su calidad de vida son contundentes para sensibilizar al Congreso, que baje prejuicios y que los diputados cumplan con las expectativas de nuestros pueblos", afirmó la autora del proyecto, Diana Conti, a DIARIO POPULAR. Y a la hora de analizar la presentación en ambas cámaras y la diversidad de bloques la autora del proyecto, se mostró optimista: "Contamos con el apoyo de varios partidos, en todos los bloques hay legisladores que acompañan la iniciativa". 

      Embed
banner

A su vez, el doctor Marcelo Morante -profesor de la Universidad Nacional de La Plata, especialista en cannabis, y médico que impulsa el proyecto de investigación- también habló con DIARIO POPULAR de este avance que se ha logrado. "Teníamos que romper el silencio, salir del ámbito debate académico porque se estaba necesitando información médica para que el debate sea real e informado. Uno habla de marihuana medicinal en contextos paliativos. Hay pacientes que la están pasando muy mal, que tienen una muy mala calidad de vida. El cannabis no viene a sustituir, viene a complementar la medicina tradicional. Con la marihuana medicinal serán muchos los pacientes que van a vivir mejor", aseguró Morante.

Actualmente este proyecto está siendo discutido en las Comisiones de Salud y de Legislación Penal del Congreso Nacional.
      Embed


La Madrid, el pueblo que se planta

General La Madrid
, pueblo ubicado al sudoeste de Buenos Aires a 450 km de la Capital, fue noticia cuando el Concejo Deliberante local aprobó una resolución en la que solicitaba al Congreso Nacional la despenalización de la siembra, el cultivo y la producción de elementos en base a marihuana con fines medicinales.

Uno de los impulsores de la petición meses más tarde llegaría a la alcaldía de esa localidad: El dr. Martín Randazzo, quien asumió en diciembre como intendente de La Madrid por el Frente Cambiemos. Y Randazzo ya piensa en activar: "Buscamos ser el primer pueblo que cultive marihuana terapéutica y realice un ensayo clínico con epilepsia refractaria", remarcó Randazzo a Diario Popular.

Además el intendente reconoció que "la población de General La Madrid tomó como propia la iniciativa"; y contó que ayer y hoy, "la ciudad tiene el orgullo de ser sede del Primer Seminario Internacional de Cannabis Medicinal" donde confluyen especialistas e investigadores de Chile, Uruguay y Argentina.

Opiniones de profesionales especialistas
*El proyecto de ley es para darle un marco legal como para que los médicos nos animemos a interrelacionar, y empecemos a hacer uso de la sustancia. Uno no deja de dejar de sentir que está en la ilegalidad. El reparo legal era necesario como pasó en todos los países que adaptaron las leyes prohibicionistas a la realidad actual. Argentina venía relegada en este tema. ¿Si es posible la aprobación? Algunos de los funcionarios dijeron que la comunidad no estaba preparada; pero encontramos una ciudad ganadera como La Madrid que dice "nosotros estamos dispuestos a hacer un centro de producción de cannabis medicinal". No es la comunidad la que no está preparada, seguramente hay otro tipo de intereses que quizás tengan que ver con la legislación o poderes políticos. Pero no lo que la gente piensa. Lo veo muy posible, el gran paso fue presentar un proyecto para la modificación de la Ley de Drogas.

*Dr. Marcelo Morante. Profesor de la UNLP, especialista en cannabis, y médico que impulsa el proyecto de investigación.
      Marcelo Morante.jpg

"El dolor no espera"

*A los siete meses de vida, Josefina fue diagnosticada con un tipo de epilepsia infantil grave conocida como síndrome de West. Luego de haber vivido parte de su infancia padeciendo 700 convulsiones por día y el consumo de una batería de medicamentos legales que no arrojaron mayor resultado que efectos adversos, la preocupación y amor de sus padres los condujo a adquirir información y coraje respecto del uso medicinal del cannabis. Mediante tal sustancia, a la edad de tres años, Josefina no llega a 20 convulsiones diarias y redujo sustancialmente el uso de otros medicamentos a menos de la mitad. La ANMAT ha autorizado desde el año 2015, la importación de un aceite cannábico mediante el sistema de importación de medicamentos de uso compasivo (Disposición ANMAT N° 840/95), que es el utilizado por Josefina para mejorar su calidad vida.

A los 71 años de vida, Alcides Pacífico Hilbe, un jubilado del rubro siderúrgico, tiene padecimientos de salud que incluyen acúfenos, dolores cervicales, lumbalgia, disminución auditiva, cuadro depresivo y problemas para comer, motivo principalmente de largos años de trabajo en aquel rubro. A fin de paliar los efectos de sus enfermedades y padecimientos, ha consumido toda clase de medicamentos tradicionales, pero nada le ha producido mejoras ni resultados positivos sustanciales. Como consecuencia de esta situación, desde hace algunos años utiliza el cannabis de forma terapéutica para paliar sus dolencias, procediendo a abastecer su propio consumo mediante el cultivo de plantas en el interior de su hogar. Una supuesta denuncia anónima y la posterior orden de allanamiento de su casa, en donde encontraron cinco plantas con escasa cantidad de THC (según peritaje), determinaron que actualmente se encuentre procesado por un delito que contempla una pena de 4 a 15 años de prisión. Misma pena que puede corresponder a un narcotraficante.

      Mariano Fusero.jpg
La situación del cannabis en Argentina y buena parte del mundo, está atravesada por tales realidades y muchas otras, que precisan de forma urgente una revisión institucional y normativa que contemple que detrás de la retórica de la "guerra contra las drogas", hay personas que sufren innecesariamente. Altos organismos de las Naciones Unidas, que dedicaron sus esfuerzos históricos en materia represiva y lesiva, reconocen hoy en día que "el sufrimiento innecesario por falta de medicación adecuada debido a la inacción y al exceso de requisitos administrativos es una situación que nos avergüenza a todos" (JIFE, 2016).

No basta con el reconocimiento de derechos humanos elementales como ser el derecho a la vida, autodeterminación y salud integral de las personas, sino se reconocen las vías de acceso a las sustancias que garanticen o coadyuven en el pleno goce de tales derechos.

Sin dejar de reconocer la importancia y avance que ello significa, no deja de ser limitante la necesidad de realizar engorrosos trámites para acceder a la importación de sustancias desde EEUU o Europa, con los costos en dólares que ello conlleva. Más aún cuando existe un interés local como el expresado por la comunidad de Gral. La Madrid, donde se solicitó autorización para realizar un cultivo estandarizado de cannabis a fines de investigación y eventual producción de sus derivados bajo estricta supervisión médica, científica e institucional. Dicha posibilidad, en su correcta puesta en marcha, deberá tender a sociabilizar el acceso a dicha sustancia para todo aquel que la precise, haciendo perdurar el criterio de solidaridad que la impulsa desde sus inicios.

Asimismo, la vía del cultivo para consumo personal (autocultivo) debiera ser garantizada como otra forma clara y legítima de provisión. Ello se debe a que el cannabis y sus derivados pueden ser de fácil producción doméstica, sin necesidad de incurrir en gastos exorbitantes de importación y sin necesidad de aguardar la eventual habilitación de producción local de cannabis que brinde mayor accesibilidad a la sustancia. El dolor no entiende de gastos, de trámites burocráticos, ni de tiempos o contratiempos políticos.

      Embed
La iniciativa parlamentaria representada por la diputada nacional Diana Conti, en conjunto con otros legisladores, encuentra en este contexto cierta oportunidad de debate y aprobación. Cabe destacar que al menos en apariencia, son varios y diversos los bloques parlamentarios que históricamente han presentado iniciativas que abarcan la no criminalización del autocultivo, sin especificar los fines medicinales, terapéuticos o meramente recreativos del mismo. Desde el año 2009 (fallo "Arriola" de la CSJN), trece proyectos de los más diversos bloques han propuesto la no criminalización del autocultivo por considerar a dicha figura como una acción privada de las personas que se encuentra protegida por la Constitución Nacional (Art. 19). Entre ellos, se incluye el proyecto de reforma al Código Penal de la Nación en el cual ha participado como representante del actual partido de gobierno, el senador Federico Pinedo.

En tal sentido, pareciera poco viable ejercer una oposición racional a iniciativas menos pretenciosas (sólo uso medicinal) a aquellas que fueron propuestas oportunamente por gran parte del arco político legislativo de nuestro país. Pero, en el oportunismo político y la retórica punitiva contra las "drogas" como enemigo de consenso, todo es posible de esperar.

Quienes no pueden esperar son Josefina, Alcides y tantos otros usuarios de una sustancia con amplio reconocimiento internacional en sus facultades terapéuticas, quienes precisan de la misma a fines medicinales o meramente paliativos. Ellos necesitan acceder a la sustancia de la forma más ágil y efectiva, sin trabas burocráticas innecesarias, y necesitan no correr riesgo de ser criminalizados por ejercer actos cuyo único fin es disminuir la injusticia de sus dolores.

      Embed



Sin dejar de lado otros reclamos, ni olvidarnos que la guerra a "la guerra contra las drogas" es más abarcativa que esta batalla, cada paso para desenmascarar la irracionalidad del poder punitivo bajo el prohibicionismo totalizante, es un hecho que debemos apoyar quienes bregamos por el respeto y reconocimiento de los derechos humanos.

La situación del cannabis en Argentina y buena parte del mundo, está atravesada por realidades que precisan de forma urgente una revisión institucional y normativa que contemple que detrás de la retórica de la "guerra contra las drogas", hay personas que sufren innecesariamente. El dolor no espera. 

*Mariano Fusero, miembro de la Asociación Pensamiento Penal (APP).

Contacto

Registro ISSN - Propiedad Intelectual: Nº: RL-2021-110619619-APN-DNDA#MJ - Domicilio Legal: Intendente Beguiristain 146 - Sarandí (1872) - Buenos Aires - Argentina Teléfono/Fax: (+5411) 4204-3161/9513 - [email protected]

Edición Nro. 15739

 

Dirección

Propietario: Man Press S.A. - Director: Francisco Nicolás Fascetto © 2017 Copyright Diario Popular - Todos los derechos reservados