El director de cine Bryan Singer, de 48 años recibió una denuncia por abuso deshonesto y sodomía por parte de un hombre que tenía 17 años al momento del hecho.
El abogado Jeff Herman, que representa al denunciante Michael Egan, le explicó a la prensa que su cliente fue llevado a una mansión en Hawai en más de una ocasión donde fue abusado por la vía oral y luego sodomizado por Singer, luego de que se le suministrara alcohol y drogas cuando tenía tan sólo 17 años.
Según explicó el abogado, Egan se mudó a Los Angeles cuando tenía entre 14 y 15 años para entrar en el mundo artístico y, una vez allí entró en contacto con siniestros personajes de la farándula autóctona que lo llenaron de "regalos extravagantes" y viajes en aviones privados mientras lo llevaban de fiesta en fiesta con la excusa de hacerlo participar en castings. Pero el abogado estipula que en esas fiestas, el ambiente era sórdido ya que era frecuente el contacto sexual –alcohol y drogas mediante- entre adultos y los adolescentes que circulaban por las mismas.
"Hollywood tiene un problema serio con la explotación sexual de los chicos", dice Herman quien presentó la denuncia alegando ataque sexual, intención de infligir angustia emocional e invasión de la privacidad y otros males.
Por su parte, Marty Singer, abogado del director, calificó la denuncia de "absurda y difamatoria" y explicó que la misma carece de mérito alguno, con lo que se mostró confiado en que la denuncia no prosperará.
Herman es un abogado del estado de Florida experto en causas de abuso sexual a menores, que el año pasado saltó a la fama tras acusar a uno de los titiriteros de Plaza Sésamo de abusador.
La denuncia se hace pública días antes de que Bryan Singer estrene su nuevo filme basado en las historietas de los superhéroes conocidos como los X-Men, de los cuales ya había estrenado otras dos entregas en los años 2000 y 2003 con notable suceso de público y críticas.
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