A catorce años de su emisión, Tumberos sigue siendo una suerte de referente que marca parámetros a la hora de realizar una ficción basada en el sistema carcelario de la Argentina, pero eso puede cambiar y añadir un nuevo jugador si El Marginal, que se estrenó este jueves, mantiene su ritmo narrativo y calidad.
La trama de este ciclo –que también tiene como artífice a Sebastián Ortega- gira en torno a Palacio, un ex policía que es forzado por el juez Lunati (Mariano "Don Carlos" Argento) a internarse dentro de una cárcel para descubrir dónde tienen secuestrada a su hija Luna (Maite Lanata).
En el primer episodio, Palacios, que adopta la personalidad de "Pastor" y consigue un lugar entre el sector denominado "la villa" de la cárcel y que no es otra cosa que un tolderío improvisado por los internos en el patio del establecimiento ya que los pabellones están saturados.
En este ambiente, Palacios conoce a "Morcilla" (insuperable Carlos Portaluppi), mano derecha de los hermanos Borges (interpretados por Claudio Rissi y Nicolás Furtado), que luego se descubre que son los ideólogos del secuestro.
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El ambiente de violencia y marginalidad que se vive en la cárcel se ve incrementado por la aparición de una facción que le disputa el poder a los Borges y que ve en "Pastor" a un posible líder, aunque éste busca pasar desapercibido ante el riesgo que se descubra su verdadera identidad.
Al mismo tiempo, en este primer episodio (de 30 iniciales) hizo su aparición Emma (Martina Gusmán), una asistente social que, a punto de convertirse en madre soltera, buscará ayudarlo a ingresar a los pabellones del interior de la prisión.
Si bien la comparación con Tumberos es inevitable (hasta el punto que el personaje principal lleva el nombre del protagonista de aquella ficción, Germán Palacios), en pocos minutos este producto se muestra tan sólido y bien construido que adquiere personalidad propia, apoyado por las gran actuación de Juan Minujín que, dejando de lado todos sus trabajos en comedias, demuestra con convicción que puede interpretar cualquier papel que le venga en suerte.
La realización técnica, que corre por cuenta de los directores Luis Ortega, Javier Pérez y Alejandro Ciancio, se muestra cimentada con la buena experiencia adquirida a partir de la premiada Historia de un Clan y logra meter al espectador en el ambiente carcelario sin golpes bajos para contar una historia que se perfila como un verdadero clásico.
Pero como muestra basta un botón, a continuación podrá ver el episodio desde el perfil de YouTube de La TV Pública.