Ayer por primera vez explotó Adrián Suar y sacó un durísimo comunicado a la prensa para aclarar los puntos por los que lo acusa su ex mujer y madre de su hijo Toto Kirzner, Araceli González. Quien hasta ayer seguía internada producto de una bacteria que infectó la sangre, aludió al gerente de programación de El Trece en relación al gran estrés que atraviesa por la guerra judicial que mantiene por la división de Polka.
Con pruebas y de manera tajante señaló: "Nunca fue mi socia", para advertir además que si sigue con la guerra mediática, podría iniciar acciones legales para defender su buen nombre y honor.
Todo indicaría que en horas, la actriz recibiría el alta médico y podría volver a su actividad normal. No obstante de ello. luego de una semana internada, Araceli se manifestó a través de las redes sociales: "Fiebre, dolores, incertidumbre y miedo me bajaron las defensas. Mi cuerpo estaba batallando con una bacteria que llegó hasta mi sangre".
La actriz llegó a estar en terapia intensiva hasta dar con la medicación adecuada. Durante los primeros días de internación imperaba una gran preocupación por el estado de salud. Pero en el día de ayer con el blanqueo de la internación, un implacable Suar gritó su verdad y decidió además correrse del lugar "machista" donde intenta ubicarlo su ex.
A través de sus abogados, El Chueco salió al cruce de Ara: "Ella me llama su socio. Nunca fue, ni tampoco es ahora accionista de Polka. Solamente es beneficiaria del 50% de las sumas que se obtengan oportunamente por la venta de esas acciones. Esas acciones son un bien propio, por ser la fecha de constitución de la sociedad anterior a mi boda con ella".
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El empresario, productor y actor insistió que todo está documentado en la justicia "que, al día de la fecha, el señor Adrián Schwartz Kirzner nada le adeuda a la señora Araceli González por ningún concepto derivado del convenio sobre división de bienes". En el documento se relata año por año (2005 a 2015) los acuerdos firmados por ambas partes tras la separación: "Estuve presente toda vez que la Justicia así lo ha requerido, en persona o a través de mi abogado, y lo seguiré haciendo cada vez que se me convoque".
También Suar le advirtió a Ara que deje de usar al hijo de ambos en la batalla campal que ella reabrió en tribunales: "Ara dice que procede también para proteger a su hijo, pero corre el riesgo de ser víctimas de una confusión innecesaria y nociva que pueda producir una imagen equivocada de su padre".
Muy enojado, El Chueco le pidió que a Ara que se abstenga en su caso en usar una reivindicación genuina de los derechos de la mujer porque no aplica en su caso: "Ella invoca la defensa de los derechos de la mujer cuando expresa: 'denunciar protege (...) Los atropellos suceden sin distinciones (...) Ya no nos tenemos que callar más'. ¡Suscribo por completo a cada palabra! Pero nada aplica en este caso. No hubo atropellos de ningún tipo ni motivo alguno para realizar una denuncia. Ampararse en una genuina reivindicación a través de una falsa acusación, no solo resulta irrespetuoso sino que también crea confusión".
No hay duda que Ara sacó de las casillas a Suar. Desde hace dos años que la reacción de Ara en los medios no baja. La feroz pelea arrancó con una declaración de la ex segunda mujer de Suar y madre de su segunda hija (Margarita), Griselda Siciliani, cuando en 2017 en Intrusos señaló que "si a Adrián no le sirve Fabián Mazzei (pareja de Ara), no lo llama" y Ara saltó como leche hervida y se armó un escándalo que hoy se podría decir que no hay retorno de esta pelea.
"Será la única vez que hable del tema. Como dije al inicio, para mi mundo privado siempre elegí la discreción. Pero esta vez no me dejó otra alternativa, más que salir al ruedo y defenderme con la verdad y las pruebas, como corresponde. Duele, y mucho", terminó el comunicado de Suar.