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La rosarina contó detalles de cómo fue su charla con su pareja después de la infidelidad. Granata aseguró que ella "ya sabía" que algo pasaba pero cuando se enteró le "temblaron las piernas" y tuvo taquicardia
El viernes fue el día en el que Amalia Granata decidió cerrar una semana que la tuvo como protagonista de un escándalo mediático que incluyó infidelidades, amenazas y mucha preocupación por su embarazo. Es que a comienzos de semana salió a la luz una foto de su pareja, Leo Squarzon, junto a una joven rubia. Con el correr de las horas se supo que se trataba de Paula Linda quien después aseguró conocer al novio de Granata desde hacía tiempo y que fue él quien la buscó y nunca le habló de su compromiso con Granata. Por eso en su programa de radio en Mitre, la rosarina contó sus sensaciones a una semana del escándalo. "Estoy bien. Estoy muy tranquila, nunca en mi vida estuve tan tranquila. No es que nací así, me costó, pero durante todos estos años hice un trabajo espiritual muy intenso para canalizar las situaciones de dolor y sacar siempre lo positivo", comenzó diciendo.
En la charla que tuvo con su compañero de programa, Marcelo Polino, Granata dio detalles de cómo se enteró que su novio la había engañado: "El sábado pasado salgo de la radio y me mandan un mensaje que no leí porque estaba manejando. Ahí me llaman por teléfono, atiendo y era una productora de Canal 9 para decirme esto que sabía. Me empezó a dar taquicardia y se me aflojaron un poco las piernas. Llegué a mi casa y lo llamé al padre de mi hijo para contarle lo que pasaba y le dije que hablábamos después", aseguró.
La parte más picante del diálogo, fue cuando la periodista contó el momento en el que Leo llegó a la casa y se sentaron a hablar de lo que ella ya sabía, el engaño, y dejó una frase bien a su estilo. "Cuando Leo llega a mi casa no estaba tranquilo. Yo estaba sentada en el sillón mirando una película. Me dijo '¿me baño y hablamos?'. Le dije que sí, así que se bañó, yo lo esperé en el sillón, apagué la tele y ahí empezamos a conversar. Él me dijo pasó esto, tal día, con esta persona, esta vez, el chat'", dijo. Y Granata respondió con su ironía: "Me hubieses cagado con la China Suárez, no con este mamarracho".
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En cuanto a la charla que tuvieron en el living de la casa, Granata aseguró que fue en buenos términos y que nunca perdió la calma. Por otra parte, contó que ella ya estaba sospechando desde hacía algunos días que su pareja la había engañado y dio detalles de cómo lo supuso. "Cuando Leo llegó a casa yo ya sabía todo, ya había hecho mis averiguaciones así que lo único que esperaba es que me dijera toda la verdad. Y él se sentó y dijo todo. No había chance de que mienta. Que decida relajar la situación no significa que sea tonta, yo sé todo. Y ato cabos. Yo sé cuando pasó (la infidelidad) que fue la semana pasada porque Leo siempre llega tipo 1 a casa porque está con la pizzería y yo como tengo radio a las 6.30 todos los días, a las 22.30 ya estoy durmiendo. Ese día, llegó a la 1 y me encajó un beso y me despertó, ahí olí algo raro y fue esa noche, claramente. Porque siempre llegaba en silencio para no despertarme y ese día, no. Yo tengo 35 años de calle, no de nada", continuó.
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