Ayer en Intrusos (América) se informó de otra batalla judicial que tiene larga data, pero que ahora se actualiza, porque viene el contraataque. Se trata de un litigio entre referentes evangélicos: La Pastora Irma demandó por 20 millones de dólares a su ex marido y el Pastor Giménez, quien hoy tiene otra familia tras el conflictivo divorcio que ambos tuvieron en 2005.
Si bien ambos tomaron diferentes caminos, lo cierto es que la justicia se toma su tiempo para un acuerdo o sentencia en la división de bienes en común: "Tratamos por todos los medios con mi letrada de buscar la paz y seguirla, pero Héctor Giménez no quiere buscar la paz, estamos en la segunda mediación y no vemos un camino allanado para un acuerdo".
La pastora Irma señaló que "se reclama la compensación económica, desde el 2005 se dictó sentencia y se presentaron todos los bienes a quiebra y no hubo división de bienes de la sociedad conyugal, como correspondía.
Irma agregó que "él presentó quiebra, la sentencia del divorcio es de 12 de octubre de 2005, pasada esa fecha se puso a los bienes a nombre de otras personas conocidos, amigos, fieles de la iglesia, al presentarse la quiebra el juez determinó un valor económico mensual del cual siempre incumplió.
En su pelea por lo que Irma cree que le corresponde por ley, afirmó la abogada, Verónica Rodríguez Gabriolo Fasán: "Le damos con mi defendida una nueva oportunidad para que se presente y llegar a buenos términos para no ir a una instancia judicial. El reclamo es de 20 millones de dólares en compensación económica, está todo fundamentado con los bienes y los miembros de la iglesia, estamos entre 15 y 20 iglesias, hay muchos bienes ocultos. Se ordenó que el pastor esté fuera del servicio y no represente a la iglesia, y encontramos falsificaciones de firma, en la que ella como pastora no estaba notificada. El firmaba para que ella no se presente".
Y remató que "el Pastor Giménez no está habilitado en ninguna iglesia. El cine Roca de la Av. Rivadavia es de la señora Irma, es un bien adquirido por ella que él está usufructuando. Hace 15 días hubo amenazas telefónicas por la que mi cliente fue humillada".
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