Diego Maradona volvió a la Argentina y la polémica estalló no sólo en el ámbito futbolístico, ya que como veedor de la FIFA aseguró que su voto será crucial en la elección del próximo presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), sino también en el círculo familiar.
Ocurre que desde que inició las acciones judiciales contra su ex esposa Claudia Villafañe, el Diez abrió también una disputa con sus hijas, Dalma y Gianinna y por eso se ve impedido de encontrarse con su nieto, Benjamín Agüero.
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Por eso, en una entrevista con el ciclo Los Ángeles de la Mañana (El Trece), el ex técnico de la Selección Argentina contó que está dispuesto a ir de rodillas ante sus hijas a implorar perdón. "Si yo le tengo que pedir perdón a mis hijas y a mi nieto, lo hago. Hablé con Francisquito (por el Papa) y él me dijo que el perdón viene solo. Ya vino Dieguito y Jana y ya llegarán los demás", le indicó a la notera del programa.
Pero no es ese el único frente en el que combatirá el Diez ya que su ex pareja Verónica Ojeda también tiene lugar en sus planes a futuro. "(Con Verónica) Tenemos un problema de familia. Yo quiero solamente a Dieguito y nada más. (...) No lo puedo sacar a más de 110 kilómetros de distancia y con eso ganan tiempo los abogados (de Verónicas Ojeda) y si yo tengo que pedir la tenencia de Dieguito, la voy a pedir", indicó, enfático.