Más tarde la conductora se mostraría agradecida con el público y con el médico que la atendió. Y hasta bromaría sobre la operación. "Voy a usar todas la piedras para jugar al truco". No hubo piedras entre ésta y Nazarena Vélez, la invitada, pero sí algunas discrepancias, a propósito de un ex que tuvieron en común, aunque con diferentes experiencias: sí, Huberto Roviralta.
La madre de Barbie Vélez aseguró que no tuvo tantos novios y hasta contó que se casó virgen a los 18 años. Sin embargo, el tema se puso complicado cuando lanzó la primer indirecta. "Fui novia del ex de una diva, pero no por mucho tiempo", lanzó. Rápida y atenta, Giménez no se guardó nada y contraatacó: "No sabe de la qué se salvó".
Igual Nazarena destacó la amabilidad del polista y hasta confesó un inesperado gesto. "Una vez tuve problemas con una camioneta y él se encargó de todo, al final me entregó un vehículo nuevo", dijo ante la mirada absorta de la anfitriona. Incluso "Roviralta trabajó en una joyería una semana, por una apuesta que había hecho con Rial", amplió Vélez, con menos sutileza. "¡Con razón y después se robó un anillo!", remató Su, ante la sonrisa espontánea de Gasalla y el público.
No conforme con esto, Susana manifestó sus dudas, en relación al doble gesto de quien fue su esposo por casi una década. "No puedo creer que haya trabajado, ni que le haya regalado el auto", confesó.
El tema quedó ahí, aunque ambas se cruzaron miradas un par de veces más. Fiel al sketch Vélez pidió permiso para ingresar, y Susana, dejó en manos de la empleada pública la decisión final. "Vos no estuviste muy bien conmigo", provocó la invitada, pero el tema no pasó a mayores. "Antes del cierre, Nazarena evitó hablar de Fede Bal y hasta dijo que Barbie tenía muchos candidatos "pero hoy siente miedo de volver a sufrir". Al final, las rubias se despidieron en paz.
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