Un profesor de un colegio secundario, un canal de televisión y un periodista uruguayos enfrentan hoy una demanda judicial en la cual la parte que se considera afectada les reclama una indemnización de 900 mil dólares por haber dado a conocer el increíble caso de un niño fallecido hace 45 años que fue fotografiado en el interior de una bóveda del cementerio de Salto.
El doble perfil de esta historia, el paranormal y el judicial, comenzó a plasmarse en abril del año pasado cuando el profesor de Historia José Buslón llevó a un grupo de alumnos del liceo número 2 de Salto a recorrer el cementerio local para descubrir símbolos culturales en la arquitectura de las tumbas y panteones.
Para la tarea los estudiantes debían tomar fotografías que después analizarían en un trabajo práctico pero grande fue la sorpresa de una de las alumnas cuando al ver las imágenes que había tomado del frente de una bóveda familiar en la necrópolis, notó que detrás de la puerta vidriada se distinguía con claridad la figura de un niño.
Superada la impresión inicial, el docente decidió profundizar en el asunto con la ayuda de sus alumnos y a partir del nombre que rezaba en el frontispicio del panteón, Ventura González, averiguó que efectivamente en 1972 esa familia había sufrido la muerte de uno de sus integrantes, un nene más precisamente, en un accidente de tránsito.
Con la imagen del chico fantasma viralizada por todo Uruguay, Buslón dio con las hermanas del niño de la foto cuyos restos, para entonces, ya no descansaban más en esa bóveda. Las mujeres, que nunca habían conocido a su hermano porque nacieron después de su muerte, contaron la tragedia familiar que las había precedido al periodista Guillermo Lockhartquien ya conocía el caso por haber tomado contacto con el profesor.
Lockhart, especialista en mitos y leyendas, narró el misterioso episodio del cementerio de Salto en el libro “Resplandor”, el décimo de su autoría, que publicó el año pasado y entrevistó además en su programa televisivo “Voces Anónimas” a Bulsón sobre el hecho, lo que molestó a los familiares del chico fantasma que entablaron un formidable juicio por 900 dólares contra el periodista, el docente y el Canal 12 de Montevideo.
El fundamento del pleito entablado es, entre otras cuestiones, por “responsabilidad extracontractual por difusión de imágenes, historia personal y privada de los comparecientes por difusión de hechos sin autorización”.
En marzo pasado, un intento de conciliación entre las partes culminó en un rotundo fracaso. Diego Durand, abogado de Lockhart, señaló en aquella oportunidad a Portal Montevideo que el monto reclamado “es disparatado” y consideró que lejos está de ser sólido el planteo de un pleito por parte de la familia que se considera afectada, sostenido “en daño futuro y lucro cesante de una persona muerta hace más de 40 años”. Durand, por otra parte, aclaró que Lockhart en su libro si bien cuenta la historia en ningún momento hace mención del nombre del chico y detalló que su cliente “nunca usó la foto” tomada por la alumna de Buslón “ni la proporcionó” a efectos de su difusión.
La imagen captada por la alumna muestra en el ángulo inferior izquierdo de la puerta al panteón la figura de un niño que mira hacia el exterior de la bóveda y que está muy bien peinado y luce una camisa beige.
Al ser mostrada esa foto a una docente jubilada de Salto, la mujer afirmó que esa imagen del niño fantasma corresponde a un nenito que era amigo de su hijo. En ese sentido, la profesora retirada aportó otro detalle tremendo: el accidente que le costó la vida al chico de esta historia ocurrió cuando iba al cumpleaños de su hijo.