Fútbol
El Vasco se la juega con un 4-4-2, bajando al chileno Fuenzalida de mediocampista por derecha, para tapar a la figura de Cerro, Oscar Romero. Juan Manuel Martínez, descartado por un golpe
Tal como se presumía, el técnico de Boca, Rodolfo Arruabarrena, saldrá a jugar la revancha ante Cerro Porteño de Paraguay por la Copa Sudamericana, con un planteo más cauteloso, dejando de lado el 4-3-3 y poniendo en práctica un 4-4-2, donde el chileno José Pedro Fuenzalida se retrasará a la posición de mediocampista por derecha, en lugar de hacerlo como extremo por el mismo sector. Así al menos fue lo que probó en la última práctica, donde también quedó confirmado que el delantero Juan Manuel Martínez quedó descartado, debido a un traumatismo en su pie derecho.
De esta manera, la formación para enfrentar mañana a Cerro, en el estadio Defensores del Chaco, será con: Agustín Orión; Leandro Marín, Claudio Pérez, Juan Forlín y Nicolás Colazo; José Pedro Fuenzalida, César Meli, Cristian Erbes y Fernando Gago; Jonathan Calleri y Andrés Chávez.
Con la posición de Fuenzalida, Arruabarrena intentará contener a la máxima figura de los paraguayos, Oscar Romero, quien suele desequilibrar con su gambeta en velocidad.
Además de los titulares, la delegación la completan Emanuel Trípodi, Emanuel Insua, Mariano Echeverría, Andrés Cubas, Federico Carrizo, Luciano Acosta y Emmanuel Gigliotti.
La buena noticia de la jornada la dio Daniel Díaz, quien fue exigido en el campo de juego y respondió en buena forma. El "Cata" sufrió un esguince de ligamento colateral medial de su rodilla izquierda previo al Superclásico y hace cerca de diez días se resintió nuevamente en la zona. Y si todo marcha como hasta ahora, en Boca son optimistas para que el defensor en una semana ya comience a entrenar a la par de sus compañeros.
El plantel viajará hoy, a las 10, en vuelo charter, hacia Paraguay, y se entrenará por la tarde en el estadio Defensores de Chaco, escenario donde se jugará su pase a semifinales de la Copa Sudamericana, con 3.000 hinchas del xeneize, quienes entre protestas (Cerro en la Bombonera tuvo 4.500 localidades), agotaron rápidamente las ubicaciones.Te puede interesar:
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