Según trascendió periodísticamente, el jugador contó que se despertó por los gritos de la denunciante y que en ese momento vio a su colega desnudo y con el pene erecto. De acuerdo a la reconstrucción, pasaron pocos segundos para que la chica se vistiera y se retirara del departamento de Wilde donde ocurrieron los hechos.
Esa misma mañana comenzaron los mensajes de texto cruzados que, a juzgar por las estrategias de defensa de las partes involucradas, tal vez no serían tan determinantes en la causa. Es que, si no se demuestran pruebas físicas contundentes de que hubo un abuso sexual con acceso carnal, la historia podría quedar entre dos versiones enfrentadas y sin condenas de peso.
En ese contexto se esperaba con ansias la declaración de Benítez, quien le reconoció al juez que no sabe si creerle al denunciado o a la supuesta víctima. "Él estaba siendo presionado por dos lugares: la chica que le decía que declare, y el compañero que le decía que si ella lo denunciaba, lo estropeaba y se mataba", comentó Schlagel en alusión a los mensajes de texto.
"Él dijo (al fiscal) que no puede ponerse de un lado o del otro", sentenció el letrado al finalizar la declaración de su cliente, que duró unas tres horas. "Todavía está en la duda hasta el día de hoy... por eso (cuando ocurrieron los hechos) no agarra a trompadas al amigo ni le dice nada a la chica. Él sigue esperando".
Y, sobre el acusado, pronosticó: "Zárate no creo que vaya a negar la relación. Lo que él le dice es que ella se dio cuenta de que estaban teniendo una relación porque lo miró y no le dijo que no; él lo entendió como un consentimiento. 'Yo lo hice, pero con consentimiento', dice Zárate. Eso Benítez no lo vio".
En ese sentido, manifestó que "si es una relación consentida, no hay delito; si no, es abuso sexual con acceso carnal, que tiene una pena gravísima, de 6 a 15 años de prisión".
La declaración de Benítez cambió la postura de la querella, que horas antes, previo a la declaración, había deslizado que el futbolista en cuestión podría ser "partícipe necesario". "Si estaba muuuuy cansado, lo tendrá que explicar en la audiencia", había dicho con cierta ironía Omar Daer, el abogado de la joven.
Sin embargo, al término de la declaración, Daer reconoció que le cree a Benítez. "Estoy convencido de que lo cuenta con mucha credibilidad. Ahora vamos a ver que dice (Nicolás) Pérez", completó. Ese testimonio tendría lugar el martes de la próxima semana.