Fútbol
Repasamos algunos casos que entraron en la historia y que generaron una fuerte suspicacia, en la cual un equipo, “queriendo o no”, terminó perjudicando a su clásico rival. ¿Qué pasará el viernes en el Sur?
La sospecha muchas veces ha viajado alrededor del fútbol. No importa la época, ni la competencia. Y aunque la verdad siempre se escribe dentro del campo, no con comentarios ni especulaciones, la historia registra casos polémicos y curiosos, en los que hinchas de un equipo 'eligieron' la derrota antes de favorecer al tradicional adversario deportivo.
Ahora, protagonizado por un grupo del que se desconoce su peso y su conformación, pero que hizo circular panfletos para presionar a los jugadores albicelestes, eso se da en la antesala del choque entre Quilmes y Racing, muy importante para la lucha por la permanencia que mantienen el Cervecero y el archirrival de Racing: Independiente.
Aquel partido "inolvidable"
Con esa escenografía, entre los recuerdos es inevitable aquel que dejó el empate sin goles entre Boca y Oriente Petrolero, por la fase de grupos de la Copa Libertadores 1991. 'Vamos Boca, que tenemos que empatar... si empatamos, las Gallinas ya se van', cantaron esa noche del 5 de abril los simpatizantes xeneizes, quienes en algún momento hasta abuchearon a Diego Latorre por patear al arco y terminaron celebrando el resultado de manera especial, aunque no tanto por la clasificación azul y oro, sino porque, así, River quedó eliminado. Hubo una queja formal del club de Núñez ante la Confederación Sudamericana de Fútbol, pero nada cambió.
Otro capítulo más
La misma rivalidad maquilló otro capítulo similar en 2004, cuando Newell's Old Boys, que peleaba por el título con River, visitó la Bombonera varios años más tarde, en el Apertura 2004. Fue por la decimoséptima fecha. Con suplentes, porque también estaba participando en la Copa Sudamericana y debía enfrentar al Internacional de Porto Alegre, Boca cayó por 3 a 1 ante los rosarinos y el estadio dividió sus deseos esa vez, como seguramente ocurre en la actualidad con el sentimiento del público de Racing. Los que sólo pensaban en perjudicar a River sintieron satisfacción pese a la derrota, pero desde otros sectores partieron cuestionamientos de quienes no se bancaban que Boca perdiera, por más que eso perjudicara a los 'primos'.
Los primos y los platenses
En 2006, el cruce entre Gimnasia y Boca generó comentarios de todo tipo. Primero, por la suspensión al cabo del primer tiempo, cuando el árbitro Daniel Giménez denunció que el por entonces presidente del Lobo, Juan José Muñoz, (recientemente fallecido) había 'invadido' su vestuario para amenazarlo. La reanudación se produjo semanas después, ya con Boca y Estudiantes peleando por el campeonato. Gimnasia ganaba 1-0, pero terminó cayendo por goleada (1-4) y luego se supo que la barra brava tripera había 'visitado' la concentración del plantel para amenazar a los futbolistas y decirles lisa y llanamente que debían perder, pues así complicarían los planes del Pincha. Obviamente, La Plata fue un hervidero en esos días y algunos recordaron otro traspié de Gimnasia como local -contra Mandiyú, en 1994-, que aceleró el descenso albirrojo.
Antes, en el Apertura 2005, la jornada número 17 provocó una situación muy particular: Gimnasia, líder con 31 puntos, visitó a River en Núñez, mientras que Estudiantes recibió a Boca, escolta a un punto del Lobo. La previa estuvo plagada de suspicacias, que se potenciaron con los resultados: 3-1 de Gimnasia en Núñez y las mismas cifras, curiosamente, de Boca sobre Estudiantes en La Plata.
Aunque muchas veces los pronósticos y las sospechas quedan desactivadas a la hora de la verdad, la polvareda que se levanta en estos casos generalmente es grande. Pero este escenario forma parte del fútbol, más cuando entramos en zona de definiciones y bajo las extrañas circunstancias que plantean algunos hinchas, esos que gozan tanto por los éxitos propios como por las desgracias ajenas.
Boca 0-Oriente Petrolero 0
En medio de insólitos cantitos de la hinchada boquense, que pedía un empate, el resultado clasificó a ambos equipos junto a Bolívar y dejó eliminado a River en la primera fase de la Copa Libertadores de 1991. Fue un pacto de "no agresión" entre el conjunto Xeneize y los bolivianos, que terminó perjudicando al Millonario, que se quedó afuera de la competencia continental.
Boca 1-Newell's 3
Por el Apertura 2004 (17a fecha), el Xeneize presentó una formación alternativa -debía jugar entresemana por la Copa Sudamericana- y cayó ante los rosarinos, que en definitiva luego serían campeones y que por entonces peleaban por el título con River.
River-Gimnasia y Estudiantes- Boca
Apertura 2005, 17a fecha, con Gimnasia en punta y Boca a una unidad. En la semana hubo infinidad de comentarios y suspicacias. Los dos encuentros terminaron 3-1 en favor de los visitantes. ¿Qué pasó después? Boca ganó los dos partidos que quedaban, Gimnasia los empató y el título se pintó de azul y oro.
Gimnasia 1-Boca 4
Fue por el torneo Apertura 2006, que finalmente quedaría en poder de Estudiantes de La Plata.
La barra brava de Gimnasia 'apretó' al plantel exigiéndole que perdiera, para no 'ayudar' al eterno rival de la ciudad en su disputa con Boca.
El Lobo ganaba 1-0 cuando el encuentro fue suspendido. Y en la reanudación (jugado en dos tiempos de 23 y 22 minutos, dos meses después), Boca concretó la goleada y finalmente perdería el título con el conjunto Pincharrata, en un encuentro desempate jugado en el estadio José Amalfitani de Vélez Sársfield.
Aquel partido "inolvidable"
Con esa escenografía, entre los recuerdos es inevitable aquel que dejó el empate sin goles entre Boca y Oriente Petrolero, por la fase de grupos de la Copa Libertadores 1991. 'Vamos Boca, que tenemos que empatar... si empatamos, las Gallinas ya se van', cantaron esa noche del 5 de abril los simpatizantes xeneizes, quienes en algún momento hasta abuchearon a Diego Latorre por patear al arco y terminaron celebrando el resultado de manera especial, aunque no tanto por la clasificación azul y oro, sino porque, así, River quedó eliminado. Hubo una queja formal del club de Núñez ante la Confederación Sudamericana de Fútbol, pero nada cambió.
Otro capítulo más
La misma rivalidad maquilló otro capítulo similar en 2004, cuando Newell's Old Boys, que peleaba por el título con River, visitó la Bombonera varios años más tarde, en el Apertura 2004. Fue por la decimoséptima fecha. Con suplentes, porque también estaba participando en la Copa Sudamericana y debía enfrentar al Internacional de Porto Alegre, Boca cayó por 3 a 1 ante los rosarinos y el estadio dividió sus deseos esa vez, como seguramente ocurre en la actualidad con el sentimiento del público de Racing. Los que sólo pensaban en perjudicar a River sintieron satisfacción pese a la derrota, pero desde otros sectores partieron cuestionamientos de quienes no se bancaban que Boca perdiera, por más que eso perjudicara a los 'primos'.
Los primos y los platenses
En 2006, el cruce entre Gimnasia y Boca generó comentarios de todo tipo. Primero, por la suspensión al cabo del primer tiempo, cuando el árbitro Daniel Giménez denunció que el por entonces presidente del Lobo, Juan José Muñoz, (recientemente fallecido) había 'invadido' su vestuario para amenazarlo. La reanudación se produjo semanas después, ya con Boca y Estudiantes peleando por el campeonato. Gimnasia ganaba 1-0, pero terminó cayendo por goleada (1-4) y luego se supo que la barra brava tripera había 'visitado' la concentración del plantel para amenazar a los futbolistas y decirles lisa y llanamente que debían perder, pues así complicarían los planes del Pincha. Obviamente, La Plata fue un hervidero en esos días y algunos recordaron otro traspié de Gimnasia como local -contra Mandiyú, en 1994-, que aceleró el descenso albirrojo.
Antes, en el Apertura 2005, la jornada número 17 provocó una situación muy particular: Gimnasia, líder con 31 puntos, visitó a River en Núñez, mientras que Estudiantes recibió a Boca, escolta a un punto del Lobo. La previa estuvo plagada de suspicacias, que se potenciaron con los resultados: 3-1 de Gimnasia en Núñez y las mismas cifras, curiosamente, de Boca sobre Estudiantes en La Plata.
Aunque muchas veces los pronósticos y las sospechas quedan desactivadas a la hora de la verdad, la polvareda que se levanta en estos casos generalmente es grande. Pero este escenario forma parte del fútbol, más cuando entramos en zona de definiciones y bajo las extrañas circunstancias que plantean algunos hinchas, esos que gozan tanto por los éxitos propios como por las desgracias ajenas.
Boca 0-Oriente Petrolero 0
En medio de insólitos cantitos de la hinchada boquense, que pedía un empate, el resultado clasificó a ambos equipos junto a Bolívar y dejó eliminado a River en la primera fase de la Copa Libertadores de 1991. Fue un pacto de "no agresión" entre el conjunto Xeneize y los bolivianos, que terminó perjudicando al Millonario, que se quedó afuera de la competencia continental.
Boca 1-Newell's 3
Por el Apertura 2004 (17a fecha), el Xeneize presentó una formación alternativa -debía jugar entresemana por la Copa Sudamericana- y cayó ante los rosarinos, que en definitiva luego serían campeones y que por entonces peleaban por el título con River.
River-Gimnasia y Estudiantes- Boca
Apertura 2005, 17a fecha, con Gimnasia en punta y Boca a una unidad. En la semana hubo infinidad de comentarios y suspicacias. Los dos encuentros terminaron 3-1 en favor de los visitantes. ¿Qué pasó después? Boca ganó los dos partidos que quedaban, Gimnasia los empató y el título se pintó de azul y oro.
Gimnasia 1-Boca 4
Fue por el torneo Apertura 2006, que finalmente quedaría en poder de Estudiantes de La Plata.
La barra brava de Gimnasia 'apretó' al plantel exigiéndole que perdiera, para no 'ayudar' al eterno rival de la ciudad en su disputa con Boca.
El Lobo ganaba 1-0 cuando el encuentro fue suspendido. Y en la reanudación (jugado en dos tiempos de 23 y 22 minutos, dos meses después), Boca concretó la goleada y finalmente perdería el título con el conjunto Pincharrata, en un encuentro desempate jugado en el estadio José Amalfitani de Vélez Sársfield.
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