El calendario preocupa a equipos de distinto modo

El de ayer fue un día para demostrarlo: el Comité Ejecutivo debía definir las comisiones para adecuar el trabajo según el nuevo estatuto -tal cual adelantó el presidente Claudio Tapia hace una semana en la asamblea que aprobó el balance deficitario-, pero la promesa se diluyó en otros menesteres: Independiente logró la consideración para habilitar a un jugador a tres fechas del final y Racing y San Lorenzo evitar sus juegos por Copa Argentina del fin de semana, siguiendo los pasos de Boca y River.

En tanto, la B Nacional no definió el modo en que jugará su próximo torneo que contará con 25 equipos y del que deben descender seis para que no crezca al compás del descarte de la Superliga y los ascensos del Federal A y Primera B.

Pidieron por escrito la anulación de los promedios para que la pérdida de la categoría se diera por resultados deportivos del torneo deben comenzar en septiembre y terminar en abril de 2018.

"No se entregó la propuesta aún", aseguró un legendario dirigente del norte argentino.

El pedido de la mesa no llegó a Tapia, quien de todos modos ya contestó oralmente: “no vamos a sacar los promedios a una categoría y mantenerlos en otra”.

La situación genera al menos un malestar entre los dirigentes de la segunda división, claves en la elección para que Chiqui fuera el presidente.

“La Superliga no quiere que sentemos precedente con el tema de los promedios. Se sacan de encima a los que no quieren y nosotros tenemos que hacer malabares”, bufó otro soldado de la Primera hora.

De momento, los de mejor suerte son los grandes de Primera. Encolumnados detrás de Boca y River que tienen sus partidos de Copa Argentina para agosto, Racing y San Lorenzo consiguieron no jugar este fin de semana por Copa Argentina con Mitre de Santiago del Estero y Cipoletti, respectivamente. Independiente, además de conseguir la habilitación de Leandro Fernández, corrió una vez más su partido con Defensa y Justicia para el 14 de junio.

LEA MÁS:

En la B Nacional asumieron la preparación de un torneo con seis descensos, pero sin promedios.

Ante la negativa, planean un torneo con fechas sin revanchas, para luego definir una zona campeonato y otra de permanencia.

Todo ajustado en 26 semanas disponibles, descontando vacaciones y fechas FIFA. Todo, quedó en veremos. Ayer Tapia viajó a Australia y la discusión se retomará en 10 días.