No hace falta más que mirar los resultados para confirmar que Italia es uno de los firmes candidatos a consagrarse en esta Eurocopa: ganó casi todos los partidos (a Austria lo venció pero en tiempo extra), solo recibió dos goles y esta tarde se impuso ante el gran desafío de medirse ante Bélgica, otra de las potencias que aspiraba a levantar el trofeo.
Con goles de Nicolò Barella y Lorenzo Insigne, la Azzurra ganó 2-1 en el Allianz Arena de Múnich y se clasificó a la semifinal de la competencia, donde se medirá con España, que en el primer turno de la jornada eliminó a Suiza con disparos desde el punto penal. Romelu Lukaku, desde los doce pasos, descontó para los belgas.
Italia, que había eliminado a Austria en tiempo extra en los octavos de final, se metió entre los mejores cuatro del certamen y buscará avanzar a la final cuando enfrente al conjunto de Luis Enrique el próximo martes 6 de julio en el mítico estadio de Wembley, Londres, desde las 16 de Argentina.
Fue un partido de ida y vuelta, digno de dos grandes favoritos a quedarse con la Eurocopa. De hecho, ya en el minuto 13, el VAR le anuló un gol a Bonucci por fuera de juego. Después, el arquero italiano Donnarumma le negó un par de chances claras a los dirigidos por Roberto Martínez.
La apertura del marcador llegó al minuto 32, cuando Nicolò Barella recibió la pelota dentro del área y soltó un derechazo que dio en el segundo palo antes de incrustarse al fondo de la red. Once minutos más tarde, Lorenzo Insigne hizo de las suyas. Agarró la pelota en tres cuartos, se sacó la marca de encima y, luego de un corto traslado, sacudió desde afuera y anotó un golazo.
Antes del cierre del periodo inicial, Di Lorenzo empujó en el área a Doku y luego Romelu Lukaku cambió el penal por gol en el adicional. Pero en el complemento Bélgica no pudo quebrar la defensa italiana y se quedó afuera de la Eurocopa.