Fútbol
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Un 30 de septiembre como hoy, pero de 1997, Martín Palermo marcó contra Independiente su primer gol en Boca. "No fue lindo pero todos los goles valen uno", recordó el Titán.
"Vos nos diste los goles, vos nos diste alegrías, lo que hiciste por Boca no se olvida en la vida". El primer gol de Martín Palermo en Boca, la primera alegría que le dio a los hinchas, fue un 30 de septiembre como hoy, pero de 1997, en un triunfo por 2 a 1 contra Independiente por el Torneo Apertura. El primero de sus 236 tantos en 404 partidos para convertirse en el máximo goleador de la historia del club y ganarse esa canción que le dedican al día de hoy los hinchas.
Palermo marcó a los 30 segundos de iniciado el partido en La Bombonera. En el primer ataque, cuando César La Paglia quiso abrirla sobre la izquierda, la pelota le rebotó a uno del Rojo y le cayó al Titán en el centro del área, quien definió cruzado y puso el 1-0 ante la salida de Farid Mondragón. El platense levantó los brazos mirando a la gente y luego festejó con sus compañeros. Nolberto Solano, el 4 de Boca de ese partido, fue el primero que fue a abrazarlo y luego llegaron Guillermo Barros Schelotto, entre otros.
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Ese debut en la red en Boca fue fiel a su estilo. Si bien lo selló con la pierna inhábil, tuvo ese olfato goleador que lo caracterizó a lo largo de toda su trayectoria. El balón, casi como un imán, le cayó de frente ante el arquero de Independiente, quien poco pudo hacer ante el remate cruzado del 9. Así pudo desahogarse después de unos primeros partidos con el Xeneize donde no había podido festejar.
Rápidamente, con un gran cabezazo, Rodolfo Arruabarrena estiró la ventaja para Boca y luego, en la segunda etapa, Arístides Rojas descontó para el Rojo. Más allá del triunfo del Xeneize por 2-1 en el clásico, aquel duelo del 30 de septiembre de 1997 quedó marcado como el comienzo de una relación fraternal entre Palermo y el gol con la casaca azul y oro.
"No fue lindo pero fue gol, que es lo importante: cómo diría más adelante Bianchi, todos valen uno. Mi gol número 1 en Boca, con camiseta y pantalones blancos y medias amarillas. Esa camiseta estuve a punto de regalarla al final del partido y el utilero, Roberto Prado, me avivó: "¿Estás loco? Guardatela para vos, es histórica", recordó el tanto el goleador en su biografía oficial Martín Palermo: Titán del gol y de la vida.
¿Cómo llegó a Boca? Palermo venía de disputar 102 partidos y marcar 36 goles en Estudiantes, donde se formó y debutó en 1992 como jugador profesional. "River y Boca estaban en puja por mi pase. Al final me definí por Boca. Maradona empujó para que vaya", contó más de una vez el Titán, que terminó jugando desde el 97 al 2011 con solamente unos breves pasos en el medio por Villareal (2001 al 2003), Real Betis (2003) y Deportivo Alavés (2004) y ganando 13 títulos: seis campeonatos locales, dos Copas Sudamericanas, dos Recopas, dos Libertadores y una Intercontinental ante el Real Madrid con dos goles suyos.