En medio de la actualidad de un equipo que se volvió a poner de pie en la Superliga y está a cinco pasos de la gloria, Ricardo Centurión juega su propio partido o hasta su campeonato aparte en Racing.
Porque el polémico jugador lanzó por la vía de la carta documento su furioso contraataque, después de que las autoridades del club, por recomendación de Eduardo Coudet, con el que discutió en medio del clásico con River, en el Monumental, lo mandaran a entrenar a la Reserva, como castigo por un nuevo acto de indisciplina.
Y ahora, Ricky lleva la disputa al terreno judicial, reclama que lo “perjudica” estar entrenando con juveniles, y por eso intima a la institución de Avellaneda a que modifique la situación, porque no descarta solicitar la libertad de acción si eso no cambia.
Casi todos los días hay alguna novedad con Centurión, por más que no juegue y que ni lo extrañen en el plantel de la Academia. Pero ayer el jugador hizo conocer su descontento por el momento que le toca vivir, y lo hizo saliendo con los tapones de punta, contra Racing y también contra Diego Milito, el secretario técnico, al que lo hace responsable de estar trabajando con la Reserva que conduce Juan Ramón Fleita.
La jornada para Centu empezó con un mensaje en las redes sociales,donde aclaró que hasta el final de la temporada seguirá en Racing, más allá de los tibios intentos que existieron para que cambiara de camiseta en el corto plazo. Y, a la tarde, fue al correo, a encender otra mecha, de una bomba que puede generar detonaciones impensadas. Porque mediante una carta documento, Centurión lanzó sus reclamos.
“Atento y toda vez que desde el día 11 de febrero de 2019 me encuentro separado del plantel superior de fútbol de vuestra institución por imposición de su secretario técnico Diego Milito, conforme me fuese comunicado y manteniendo su imposición, pese a mi inmediato y expreso rechazo”, firmó Ricky.
Y agregó: “Obligándome también a cumplir mis entrenamientos con una división inferior a la que revisto, contraria a mi categoría laboral profesional y antecedentes deportivos, causándome con ello ostensibles y graves perjuicios de índole personal, deportivo y profesional”.
Por este motivo, marcó la cancha: “Intimo a que aclaren situación laboral... cesando con el estado de incertidumbre generado por sus ilegítimas y abusivas decisiones, haciéndome saber por medios legales las razones y motivaciones por las cuales se me impide formar parte del plantel superior de fútbol de la institución y realizar las prácticas y entrenamientos con dicho plantel profesional, ajustándose así a la letra del convenio colectivo de trabajo del futbolista profesional, el contrato de trabajo suscripto y la ley de contrato de trabajo, plexo normativo que regula nuestro vínculo, cesando con ellos los graves perjuicios que vuestra conducta me genera”.
Un capítulo más, de una novela que todavía tiene mucha tela por cortar. Y ahora, los abogados de Racing, tienen dos días de plazo para la respuesta, que puede incluir hasta una sanción económica que venía demorándose.
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Después de intimar al club para que se lo reincorpore al plantel de Primera, Ricardo Centurión faltó al entrenamiento de Reserva de este jueves. ¿Irá al entrenamiento de la tarde en el Cilindro?