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Así lo informaron los trabajadores de la empresa de colectivos a raíz de la muerte de un operario en uno de los talleres de la compañía este viernes. Sus compañeros aguardan que la Justicia finalice con los peritajes en el cuerpo de la víctima y sea entregado a su familia
Trabajadores de la Línea 60 de colectivos decidieron continuar este lunes el paro que iniciaron este viernes a causa de la muerte de un operario técnico en un accidente ocurrido en la terminal del barrio porteño de Barracas.
La decisión fue tomada en una asamblea organizada por los empleados y según explicó el delegado Néstor Marcolín fue ratificada porque "nadie se hace responsable", ni desde la empresa ni desde el Ministerio de Trabajo.
"A casi 48 horas de la muerte de un compañero, no muestran un poco de sensibilidad", dijo Marcolín a la agencia Télam y agregó: "Están dejando que fluya, que nos cansemos durante el fin de semana no hay organismo oficial que tome el toro por las astas".
Cabe destacar que el conflicto se inició este viernes cuando el trabajador electricista David Ramallo, de 42 años, murió cuando reparaba un colectivo y se desplomó una rampa. Ramallo sufrió heridas graves y si bien tras el accidente fue trasladado de urgencia al Hospital Penna, perdió la vida pese al esfuerzo de los médicos, informó a la prensa otro de los delegados de la empresa Micro Òmnibus Norte SA (Monsa), Héctor Cáceres.
Delegados afirmaron que el cuerpo de delegados ya venía denunciando a la compañía ante la Superintendencia de Riesgos de Trabajo por las malas condiciones de los elementos laborales.
El paro lanzado por los choferes a causa del fatal accidente en la terminal de Santa María del Buen Ayre y Pedro de Luján, en Barracas, afectaba a unos 250 mil usuarios que diariamente utilizan los servicios de la Línea 60, con amplio recorrido en la ciudad de Buenos Aires y el norte del conurbano.
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