COVID-T es la nueva plataforma que posibilitará estudios comparativos sobre la magnitud y naturaleza de los linfocitos T de memoria -células centrales del sistema inmunológico- generados en voluntarios inmunizados con diferentes esquemas de vacunación contra el coronavirus y en pacientes recuperados de esa enfermedad a lo largo de un año.
Esta herramienta, presentada por la Unidad Coronavirus Covid-19, proveerá información útil para la toma de decisiones a corto, mediano y largo plazo, y para el diseño de nuevas estrategias inmunoprofilácticas e inmunoterapéuticas en el escenario de la pandemia por SARS-CoV-2.
COVID-T recibió el financiamiento conjunto de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), y la Fundación Bunge y Born, en el marco de la "Unidad Coronavirus COVID-19".
El proyecto fue desarrollado por investigadores del Instituto de Biología y Medicina Experimental (Ibyme), y posibilitará estudios comparativos sobre la magnitud y naturaleza de los linfocitos T de memoria -células centrales del sistema inmunológico- generados en voluntarios inmunizados con diferentes esquemas de vacunación contra el coronavirus y en pacientes recuperados de esa enfermedad a lo largo de un año.
Además esta herramienta proveerá información útil para la toma de decisiones a corto, mediano y largo plazo, y para el diseño de nuevas estrategias inmunoprofilácticas e inmunoterapéuticas en el escenario de la pandemia por SARS-CoV-2.
Durante la presentación, el investigador Superior del Conicet Gabriel Rabinovich explicó que "los linfocitos son las células centrales de nuestras defensas que nos permiten defendernos de todos los elementos extraños que nos pueden invadir".
Y dijo que pueden ser "microbios como virus, bacterias, hongos, parásitos o fragmento de tumores, y reaccionar eliminándolos. Son las células centrales de nuestro sistema inmunológicos que gatillan la respuesta de nuestras defensas", completó.
Rabinovich dijo que el estudio "tiene tres objetivos centrales: monitorear la respuesta de linfocitos T en pacientes que han sido infectados por Covid-19 durante el curso de la recuperación a lo largo del tiempo y cómo la memoria de esos linfocitos se activa en individuos que han sido vacunados con una o dos dosis, y cómo se mantiene esa memoria inmunológica a lo largo del tiempo".
Explicó que los linfocitos T "tienen 3 funciones: eliminar la célula que está infectada, activar a linfocitos B para que produzcan anticuerpos y formar parte del repertorio de linfocitos de memoria que nos van a defender frente al ingreso del virus".
Luego detalló que "cuando el coronavirus nos infecta se activan diferentes mecanismos de defensas" y "dentro de estos mecanismos cruciales están los linfocitos T".
"El virus infecta nuestro organismo, los pulmones por ejemplo, e inmediatamente hay células que se llaman dendríticas que son presentadoras de antígenos que censan continuamente nuestro organismo para poder medir el peligro que va apareciendo", señaló.
Y agregó que "cuando esas células encuentran en los pulmones el virus, toma fragmentos de ese virus y luego viaja hacia los ganglios linfáticos para presentarles esas proteínas, esos fragmentos, a un linfocito T que se encuentra en el ganglio".
Inmediatamente -explicó el especialista- el "linfocito T cuando ve a través de su receptor estas proteínas se activa y comienza a producir moléculas que pueden monitorearse y verificar si ese linfocito T está activado o no".
Y agregó que "los que fueron activados en los ganglios viajan hacia los pulmones u otros órganos que están infectados e inmediatamente eliminan a las células en forma directa".
La memoria T significa que los linfocitos son aquellos que vieron previamente al virus porque el individuo se vacunó o se infectó con SARS-CoV-2.
Estos linfocitos permiten defendernos de todos los elementos extraños que pueden invadirnos como microbios, virus, bacterias, hongos, parásitos o fragmentos de tumores, explicó Rabinovich.