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Lo afirmó su madre, quien agregó que se salvará "sólo con un milagro". La semana pasada había experimentado una leve mejoría
Mauro López Banegas se intoxicó en Santiago del Estero por inhalar purpurina. El menor de siete años, ahora está internado en terapia intensiva y el último informe médico le diagnosticó "muerte cerebral". "Sólo un milagro lo puede salvar", dijo la mamá del chico.
"Le van a realizar una nueva tomografía computada, porque según me dijeron los médicos de terapia intensiva, Mauro tiene muerte cerebral. Sólo un milagro lo puede salvar", contó a la prensa Berta Banegas, la madre del niño internado en el Centro Provincial de Salud Infantil (Cepsi) de la capital santiagueña.
Angustiada, la mujer había dicho que días atrás el nene había experimentado una mejoría, ya que había movido sus extremidades, pero dijo que "su mayor daño está en el cerebro". Y rogó: "Les pido a todos que sigan con las cadenas de oración, un milagro es lo único que puede salvar a mi hijo. Está en manos de Dios".
Angustiada, la mujer había dicho que días atrás el nene había experimentado una mejoría, ya que había movido sus extremidades, pero dijo que "su mayor daño está en el cerebro". Y rogó: "Les pido a todos que sigan con las cadenas de oración, un milagro es lo único que puede salvar a mi hijo. Está en manos de Dios".
El menor inhaló purpirna en su casa, en un accidente doméstico. Los médicos del Cepsi explicaron que "se logró lavar parte de la purpurina con lavados bronquioalveolares" y que de esa manera se pudo "oxigenar la sangre, con la esperanza de lograr su mejoría".
El niño fue internado hace más de dos semanas presentando un cuadro clínico de "severa insuficiencia respiratoria".
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