Desde hace diez años, Irene y Silvina tienen la difícil pero gratificante misión de darle un rato de felicidad a los chicos internados en hospitales a través de su trabajo artístico como clowns integrantes de Alegría Intensiva.

Una vieja canción de Los Gatos aseguraba que “Los payasos no saben reir”. Y tenía su parte de verdad, ya que en ellos anidan la risa y la tristeza. Pero los niños que se encuentran internados en algunos hospitales de la Capital y de la provincia de Buenos Aires pueden tener al menos por un rato una ventana abierta a un paraíso cuando un par de clowns los visita para alegrarles el día.

Ese ventana abierta se llama Alegría Intensiva, y es una iniciativa generada hace diez años por dos profesionales de la pediatría, Marcelo Rosenberg y Andrés Kogan, quienes convocaron a artistas de distintas disciplinas teatrales, pero esencialmente del clown, para que lleven a los chicos internados a vivir un rato de distensión y alegría que los aleje momentáneamente de alguna situación traumática en su salud.

El programa se inició en el hospital Garrahan hace diez años, y hoy se ofrece en otros nueve establecimientos. Fueron apenas 5 artistas, 3 actrices y dos actores, los intrépidos que se vieron seducidos por la propuesta y comenzaron con esta aventura, y actualmente hay 25 profesionales participando en distintos horarios y lugares.

Dos de la pioneras que emprendieron el vuelo de Alegría Intensiva son Irene Sexer (41) y Silvina Sznajder (45), actrices con distintas experiencias en más de 20 años de trayectoria. Ambas son porteñas, aunque hoy Irene vive en Victoria y Silvina en Caballito, y cuentan cómo fue su actividad antes de llegar a este rol que las enorgullece y las hace sentir bien por el ida y vuelta que encuentran con los pibes.

Irene, madre de Ramón, de 5 años, comenta que “yo empecé a estudiar teatro con Alejandra Boero, y me volqué en principio a la comedia musical, pero por una sugerencia me acerqué al mundo del clown, y podría decir que me abrió la puerta a la felicidad, porque me encontré con recursos expresivos muy diferentes”.

Estudió con Raquel Sockolowicz, Marcelo Katz y Gabriel Chamé, y resalta que “también hice teatro con Alejandro Catalán, trabajé en en Centro de la Cooperación, en el CCSan Martín y el Cervantes, y armé un unipersonal que hice durante varios años, ‘Querida Marta’ una payasa muy entrañable”.

Por su parte Silvina, casada con el actor Javier Zain, madre de Naomí, de 7, y declarada hincha de Ferro, como su papá (“jugó de arquero hace años”), dice que “desde chica me incliné hacia la danza y la música, siempre estuve cerca del arte, y mis papás me llevaban a talleres y espectáculos”.

Señala que “a los 15 años me inscribí en la escuela de Hugo Midón, me formé con él, y en la escuela de comedia musical de Ricky Pashkus. Desde los 18 trabajé con Midón en varias obras, y me capacité tanto en canto como piano y danza” y señala que “el acercarme al clown fue obra de una psicoanalista que me lo sugirió y ahí llegué a Raquel, aunque con Irene ya nos conocíamos de antes”..

Tanto Silvina como Irene dirigen un Centro de Talleres de Formación en varias áreas, en pleno barrio de Villa Crespo. Y ambas recuerdan con un cariño especial la obra “Elemental”, que realizaron en el Centro Cultural San Martín hace unos años.

La idea de Alegría Intensiva tuvo su raiz en iniciativas similares gestadas en Brasil y en España, y explican que “lo interesante desde el comienzo fue indagar en cómo la técnica del clown puede entrar a los hospitales e interactuar con los chicos”.

Aclaran que “lo nuestro no es terapéutico, y a partir de la situación que vemos, manejamos la improvisación como recurso, con mayor o menor eco, pero nos suele dar muchas satisfacciones cuando vemos reir o sonreir a un niño, y sentir que pudimos lograr el objetivo”.

Agregan que "nuestra relación con los médicos es muy buena. al principio debimos ganarnos su confianza, pero con el tiempo comprendieron nuestro lenguaje, y algunos ayudan y hasta se integran al juego”.

"El objetivo es irnos un rato de viaje con los chicos"

Si bien las performances que hacen los actores de Alegría Intensiva en los hospitales son espontáneas, la organización es esencial. Irene y Silvina detallan que “cuando empezamos en el Garrahan el director quiso ver lo que hacíamos, y enseguida se dio cuenta de lo importante que era esa interacción con los chicos y nos dio todo el respaldo”

“Todo - destacan -requiere una planificación: los horarios, los días de la semana, los lugares a los que ingresaremos, que pueden ser tanto las salas de espera como algunas salas de internación, y ver qué recorrido es el ideal”.

Silvina dice que “nunca forzamos nada, en general vamos en dupla, un hombre y una mujer, y una o dos veces por semana a cada lugar, y no dejamos de pedir permiso antes de entrar, tenemos claro que no podemos ser invasivos” mientras Irene remarca que “podemos dirigirnos desde bebés hasta chicos preadolescentes, y con cada uno la experiencia es distinta”.

“El clima que se genera- explican- es lo más importante para saber cómo jugamos, puede ocurrir algo que nos dispare hacia otra cosa, pero siempre estará presente el juego, no hablamos de la realidad o la enfermedad” y remarcan que “el objetivo es irnos un rato de viaje con los chicos y que liberen su fantasía”.

Actualmente, Alegría Intensiva presenta su propuesta en los hospitales Garrahan, Fernandez, Elizalde, Gutierrez, Santa Isabel, Houssay de Vicente López, Falcon de Pilar, Posadas, Sor Ludovica de La Plata y desde hace poco tiempo el Mater Dei, donde incluso pueden entrar al área de terapia intensiva.

El jueves, todos por el Garrahan junto a Gieco

El próximo jueves 15 de noviembre en el Teatro Ópera, a las 21, grandes artistas se reunirán para celebrar “Todos por el Garrahan”, un recital solidario a total beneficio de Fundación Garrahan y de Alegría Intensiva, un encuentro que además celebrará la obra de León Gieco, padrino institucional de Casa Garrahan desde el año 2000.

El evento incluirá la presencia, además de Gieco, de figuras como Juan Carlos Baglietto, Pedro Aznar, Lito Vitale, Jairo, Hilda Lizarazu, Víctor Heredia, Raúl Porchetto Ligia Piro y Peteco Carabajal entre muchos otros, y allí estarán los clowns para ser parte de la celebración.

Hace poco la entidad celebró sus diez años con una fiesta en la Casa de la Cultura, y rescatan que “la entidad no somos solo nosotros, sino también un equipo, que incluye desde psicólogos, otros profesionales, los directores y la gente de prensa.

Mientras tanto, además de seguir dando clases juntas, Silvina e Irene planifican su proximo proyecto: la obra “Las Inolvidables”, que se hará en abril en La Carpintería. Por su parte, mientras Silvina destaca la puesta de la obra para chicos “Dale” junto a su marido Javier Zain, Irene desarrolla su faz docente en clases de clown y arte escénico en la UADE.

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