Científicos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) lograron, tras 16 años de investigación, resolver el misterio que rodeaba a la formación de una nebulosa que tenía en vilo a los especialistas.
Los expertos lograron descifrar que esta nebulosa nació tras el choque de dos estrellas que se fusionaron para formar un esferoide luminoso, único en su tipo.
Cabe destacar que el primero en descubrir este fenómeno fue el Explorador de la Galaxia (GALEX), diseñado especialmente para estudiar la historia de la formación de estrellas.
Gracias al material aportado por GALEX, los científicos de la NASA encontraron la presencia de una gota de gas grande y débil con una estrella en su centro y lo bautizaron como "Nebulosa del Anillo Azul".
Y luego de más de una década y media, donde los especialistas recurrieron a diferentes modelos teóricos para recopilar datos, finalmente llegaron una repuesta, que publicaron en la revista especializada "Nature".
"Durante mucho tiempo pensamos que tal vez había allí un planeta siendo desgarrado por la estrella, y eso estaba arrojando todo ese gas fuera del sistema", detalló el astrofísico Mark Seibert.
Pero ahora los expertos de la NASA llegaron a la conclusión que el evento que produjo la formación de la nebulosa fue una fusión estelar entre una estrella similar a nuestro Sol y una de tamaño pequeño y ambas se envolvieron en un anillo de escombros.
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