El papa Francisco condenó este sábado la "violencia injustificable" del asesinato de Fernando Villavicencio, el candidato presidencial de Ecuador baleado días atras en Quito, y animó a todas las fuerzas políticas a unirse "en favor de la paz" en ese país
"Recibida la triste noticia del asesinato del señor Fernando Villavicencio, el Santo Padre desea hacer llegar su profundo pésame a vuestra excelencia, a la familia del difunto y a todo el amado pueblo ecuatoriano", planteó un telegrama enviado por el secretario de Estado, Pietro Parolin, al arzobispo de Quito, José Espinoza Mateus.
"Asimismo, ante el sufrimiento causado por una violencia injustificable, que condena con todas sus fuerzas, Su Santidad hace un llamado a todos los ciudadanos y las fuerzas políticas para unirse en un esfuerzo común en favor de la paz", enfatizó la misiva dada a conocer por el Vaticano.
“Con estos sentimientos, el papa Francisco, a la vez que encomienda a la materna intercesión de Nuestra Señora de el Quinche el eterno descanso del señor Villavicencio, imparte con afecto la bendición apostólica, como signo de fe y esperanza en Cristo resucitado”, concluyó el mensaje redactado en español.
En las últimas horas, la Justicia ordenó la prisión preventiva de los seis detenidos por su presunta participación en el asesinato a tiros del candidato a la Presidencia de Ecuador, ocurrido el miércoles pasado cuando el dirigente salía de un encuentro con simpatizantes en un colegio de Quito, en medio de una ola de violencia atribuida a una guerra entre bandas del narcotráfico, que también se libra en las cárceles.
La Fiscalía de Ecuador informó que la medida tendrá una duración de 30 días, lapso en el cual la instrucción del caso intentará determinar las responsabilidades de los seis detenidos, todos ellos de nacionalidad colombiana, por lo que ya se ha iniciado un pedido de información sobre ellos a la policía y la justicia del vecino país.
Se trata de Andrés Manuel Mosquera, José Neider López Hitas, Adey Fernando García, Camilo Andrés Romero, Jules Osmin Castaño Alzate y Jhon Gregore Rodríguez. De acuerdo con información de medios colombianos, todos ellos tienen antecedentes penales en ese país por narcotráfico, homicidio, hurto, tráfico y portación de armas y ataque contra servidor público.
En ese contexto, ya rige en todo el país un estado de excepción (estado de sitio) por 60 días ordenado por el presidente Guillermo Lasso, que incluye entre otras medidas la movilización en todo el territorio de Fuerzas Armadas para apoyar a la Policía en tareas de seguridad en las que estarán autorizadas para hacer uso legítimo y excepcional de la fuerza en contextos de control de orden público, protección interna y seguridad ciudadana.
El estado de excepción suspende, además, el derecho a la inviolabilidad de domicilio, por lo que la fuerza pública podrá realizar inspecciones y requisas, que tengan como objetivo el hallazgo de armas, explosivos y sustancias sujetas a fiscalización.