El Papa Francisco retomó sus actividades al recuperarse de la operación de una hernia abdominal y este miércoles se reunió con el presidente de Brasil, Lula da Sila, por 45 minutos y el tema principal fue la búsqueda de “la paz en el mundo”.
El mandatario brasileño le agradeció a Francisco por la audiencia y por la "buena conversación sobre la paz en el mundo", según publicó en sus redes sociales.
El encuentro entre Francisco y Lula estaba pautado para las 14:30 hora local (9.30 de Argentina) en la denominada "Auletta" del Aula Pablo VI, un gran complejo de salas del Vaticano a pocos metros de la residencia papal de Casa Santa Marta, precisaron fuentes vaticanas.
El equipo de Lula ya había anunciado que la intención del presidente era hablar con el Papa de la lucha contra el hambre, pero también sobre las iniciativas para acabar con la guerra en Ucrania.
La propuesta del mandatario brasileño, hasta la fecha poco escuchada por las potencias occidentales, pasa por crear un grupo de países que pueda ejercer una mediación y llevar a Kiev y a Moscú a una mesa de negociaciones.
Lula además tomó la iniciativa de invitar al pontífice a regresar a Brasil -su primer viaje apostólico internacional fue a Río de Janeiro en julio de 2013 por la Jornada Mundial de la Juventud- y asistir a la fiesta en honor de Nuestra Señora de Nazaret en el próximo mes de octubre.
El representante de Brasil, quien le agradeció a Francisco por escribirle mientras que estuvo preso, le regaló al pontífice un gravado de la Sagrada Familia del artista de Pernambuco J.F Borges.
Mientras que la primera dama, Rosângela "Janja" da Silva, le obsequió una estatua de Nuestra Señora de Nazaret.
Francisco por su parte le entregó su Mensaje de la Paz de 2023, el Documento sobre la Fraternidad Humana, y el libro sobre la "Statio Orbis" del 27 marzo 2020, cuando rezó por el final de la pandemia en una plaza de San Pedro desierta.
Asimismo, les regaló un bajo relieve en bronce titulado "La paz es una flor frágil".
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