El grupo extremista Estado Islámico (EI) reivindicó ayer la autoría del ataque perpetrado el jueves en Niza, Francia, que hasta ahora causó 84 muertos y más de 200 heridos, a través de un mensaje difundido por una agencia afín a la organización.
En un comunicado, la agencia Amaq, que cita "fuentes de seguridad" de la propia milicia yihadista, asegura que el ataque fue cometido por "un soldado del Estado Islámico", según el portal de información especializado SITE.
De acuerdo con el mensaje, el atentado fue una respuesta a los ataques contra civiles de los países que forman parte la coalición internacional que lidera Estado Unidos y bombardea posiciones del EI en Siria e Irak.
Mohamed Lahouaiej Bouhlel, tunecino de 31 años, embistió el jueves con un camión contra una multitud en el paseo marítimo de Niza cuando se celebraba la fiesta del nacional del 14 de julio, dejando un reguero de víctimas.
Al menos cuatro personas fueron arrestadas ayer por su presunta relación con el atentado, informó la prensa gala.
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Los detenidos, cuyas identidades no trascendieron, son hombres que pertenecen al entorno cercano del atacante; y se investiga si le brindaron ayuda o pudieron ser cómplices de la matanza.
El operativo policial, que tuvo lugar en dos zonas de Niza esta madrugada, fue adelantado por la radio Europe 1 y confirmado por fuentes policiales. El viernes, las fuerzas de seguridad habían arrestado también a la ex mujer de Bouhlel.
Hasta ahora la policía francesa mantiene todas las hipótesis abiertas e intenta determinar si Bouhlel tenía vínculos con el yihadismo.
El fiscal de París a cargo del caso, Francois Molins, dijo ayer que no estaba "fichado" por las fuerzas de seguridad especializadas en la lucha antiterrorista y que tampoco existía información que hiciera pensar que era una persona ridiculizada.
Sin embargo, el primer ministro francés, Manuel Valls, declaró al canal France 2 que se trata "de un terrorista que estaba asociado de una u otra forma con el islamismo radical".
Mientras tanto, el lugar de la masacre, el famoso Paseo de los Ingleses de Niza, poco a poco volvía a la vida, después de que las autoridades reabrieran la zona al tráfico. Un altar improvisado de ramos de flores, velas y mensajes se ha colocado cerca de uno de los extremos de la larga avenida.