El Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y el Equipo de Pruebas Integradas de la Base de la Fuerza Aérea Eglin probaron una poderosa nueva arma antibuque, la cual lanzaron desde el aire sobre un barco de gran superficie.
Un cazabombardero F-15E Strike Eagle, aeronave que forma parte del programa QUICKSINK, lanzó una munición de ataque directo conjunto GBU-31 modificada hacia una embarcación que se encontraba en el golfo de México, la cual fue destruida con éxito.
Estos nuevos métodos explorados por Estados Unidos pueden lograr gran letalidad antibuque con armas lanzadas desde el aire, incluidas las bombas guiadas de precisión JDAM modificadas de 907 kilos.
Este último experimento permitió a los investigadores evaluar los desafíos científicos y tecnológicos asociados con el concepto QUICKSINK, programa que busca adaptar armas existentes para neutralizar amenazas de superficie a bajo costo.
"QUICKSINK es único en el sentido de que puede proporcionar nuevas capacidades a los sistemas de armas del Departamento de Defensa existentes y futuros, brindando a los comandantes combatientes y a nuestros líderes nacionales nuevas formas de defenderse contra las amenazas marítimas", afirmó Kirk Herzog, gerente del programa del AFRL.
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