En el video, que fue filmado durante unos trabajos agrícolas en la región de Astracán, al sur de Rusia, se ve a un hombre, el cual intenta impresionar a otros trabajadores, agarrando una serpiente y metió la cabeza del reptil en su boca.
El espectáculo duró unos segundos, pero fue interrumpido abruptamente por el propio protagonista, asegurando que había sido mordido.
A raíz del incidente, el hombre debió ser hospitalizado. A pesar de los esfuerzos de los médicos, murió a causa del edema de Quincke. Los especialistas establecieron que el reptil con el que había estado bromeando era una víbora, subespecie de serpiente venenosa.
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