De los 15 elefantes, un macho se separó el lunes de la manada y se encuentra actualmente a unos cuatro kilómetros al noreste del grupo, de acuerdo con el mando en el lugar que sigue a los elefantes, informó la agencia china Xinghua.
Las tormentas de lluvia continuas complicaron los esfuerzos de seguimiento de los animales en el municipio de Xiyang, en Kunming. Las autoridades alimentaron a los elefantes con 2 toneladas de comida y evacuaron a los residentes locales.
En medio de los temores de que los paquidermos puedan invadir asentamientos humanos, los equipos de rastreo están trabajando las veinticuatro horas del día para monitorear sus movimientos.
Chen Fei, director del Centro de Investigación de Elefantes Asiáticos de la Administración Estatal de Silvicultura y Pastizales, dijo que estaban observando de cerca a los animales, para ver si la manada reanuda su trayectoria hacia el norte y poder evacuar aldeas si fuera necesario, dijo CCTV.
Durante más de un mes, las autoridades han enviado a la policía a escoltar a los animales, han evacuado carreteras para facilitar su paso y han utilizado alimentos para distraerlos y evitar que entren en zonas densamente pobladas.
Los elefantes asiáticos están bajo protección estatal de nivel A en China. Yunnan es su principal hábitat.
Gracias a los mayores esfuerzos de protección, la población de elefantes silvestres en la provincia ha crecido hasta unos 300, a diferencia de los 193 de la década de 1980.