El tremendo hecho sucedió el sábado a la noche y, automáticamente, Ojeda fue derivado a la Unidad de Pronta Atención de Lomas de Zamora, donde lo atendieron. El doctor Héctor Marchetta le explicó a una agencia de noticias: "Son dos heridas, una en cada muslo, compatibles con proyectiles de arma de fuego. Nos dijo que le quisieron robar y secuestrar, que las balas rebotaron en el piso y lo impactaron". Luego, fue trasladado al Hospital Churruca, donde todavía permanece internado fuera de peligro.
Todavía la investigación desconoce si fue un robo casual o una amenaza.