El hecho podría haber sido considerado como uno más de los tantos episodios de inseguridad que se viven en el Conurbano bonaerense, ya que una mujer recibió dos puñaladas al forcejear con desconocidos que le robaron su teléfono celular en pleno centro de la localidad de Merlo.
No obstante, la damnificada sospecha que no se trataría de un arrebato al voleo, debido a que, días atrás, radicó una denuncia contra un efectivo policial que tenía asignada su custodia personal, al tratarse de una víctima de violencia de género (fue quemada por su ex marido).
Karina Abregú, quien sufrió graves lesiones en el 50 por ciento de su cuerpo al ser prendida fuego por Gustavo Albornoz -al que había denunciado 15 veces por situaciones de violencia- fue asaltada y acuchillada por dos sujetos que la abordaron en la entrada de una clínica ubicada en Salta al 400 de Merlo, en horas de la mañana del pasado jueves. Allí fue sorprendida por los ladrones, quienes la amenazaron con un cuchillo y le provocaron dos cortes para quitarle su celular.
La mujer, de 43 años, sufrió lesiones de consideración en ambos antebrazos y debió ser asistida en un hospital.
Al tomar conocimiento de lo sucedido, su hermana Carolina Abregú, integrante de la organización Furia Feminista, aseguró: “Esto no fue un hecho aislado, sino un apriete”. Lo relacionó con la denuncia que se radicó contra el policía que, por orden judicial, cumplía con la custodia durante las 24 horas desde hace tres años en la puerta de la vivienda de Karina y que a raíz de ello fue relevado de esa tarea. A esto se le suma la sospecha de que los asaltantes escaparon en una moto, en medio de muchos automovilistas y transeúntes, sin poder ser detenidos.
“Karina no se resistió e igual fue apuñalada. Después estuvo una hora y media esperando una ambulancia del hospital Eva Perón, que nunca llegó y la terminó auxiliando una amiga”, dijo la hermana de la víctima.
“Ella ingresó al centro de salud a pedir ayuda y fue asistida. Y como la ambulancia no llegó se fue por sus propios medios al Hospital Eva Perón de Merlo. De todas maneras, cuando llegó se negaron a atenderla, ya que no contaban ni con médico de guardia ni traumatólogos. Allí sufrió una crisis nerviosa, ya que en ese mismo hospital no la atendieron como correspondía cuando fue prendida fuego por su ex esposo”, se indicó, añadiendo que “recién una hora más tarde realizó la denuncia correspondiente en la comisaría 1ª de Merlo”.
Al mismo tiempo, Carolina Abregú recordó: “Ella tiene custodia desde hace tres años durante todo el día y hace un par de semanas denunció al policía que estaba en la puerta de su casa, porque difundió información maliciosa sobre ella en el barrio y porque se enteró de que había intentado matar a su mujer. Parece una burla que pongan al cuidado de una víctima de violencia a un violento, pero finalmente lo sacaron”.
Ante esta sucesión de hechos, consideró que lo ocurrido “no es un hecho aislado, sino que fue víctima de un apriete” y para denunciar esta pretensión de hacer pasar este episodio como el accionar de “motochorros”, la integrante de Furia Feminista adelantó que el próximo miércoles, a las 17.30, habrá una concentración junto al mástil de la plaza de Merlo, desde donde se movilizarán hacia la sede municipal y a la comisaría 1ª.
El caso de Karina Abregú fue uno de los mas conocidos de violencia de género en el país, ya que sobrevivió a un ataque de su ex marido Gustavo Albornoz que le quemó la mitad del cuerpo en el primer día de 2013, por lo que estuvo seis meses internada y fue sometida a mas de 30 operaciones. La mujer había denunciado 15 veces a su atacante, aunque recién éste fue preso en 2016, cuando lo condenaron a 11 años de prisión por el delito de “tentativa de femicidio”.