La Justicia de Gualeguaychú condenó este martes a cadena perpetua a la joven Nahir Galarza, de 19 años, tras hallarla culpable del asesinato de Fernando Pastorizzo, con quien mantenía una relación turbulenta. En la historia criminal argentina no se registran varios casos donde los culpables hayan matado a tan corta edad.
A continuación, un breve repaso de las principales historias:
El caso del Petiso Orejudo (Buenos Aires, 31 de octubre de 1896 – penal de Ushuaia, 15 de noviembre de 1944), además de ser el más conocido, es el más antiguo del que se tenga registro.
Bautizado como Cayetano Santos Godino, recibió su apodo debido a su baja estatura y sus orejas notoriamente grandes.
Fue un joven asesino en serie, uno de los mayores sociópatas de la historia argentina, ya que a principios del siglo XX fue responsable de la muerte de cuatro niños, siete intentos de asesinato y el incendio de siete edificios.
Apodado el Ángel Negro o el Ángel de la Muerte por la prensa, Carlos Eduardo Robledo Puch (Buenos Aires. 22 de enero de 1952) es un asesino serial, uno de los mayores sociópatas y criminales de la historia del país.
Con solo 20 años fue condenado a cadena perpetua por diez homicidios calificados, un homicidio simple, una tentativa de homicidio, diecisiete robos, cómplice de una violación, y de una tentativa de violación, un abuso deshonesto, dos raptos y dos hurtos.
Cumple prisión efectiva desde 1972 y actualmente está recluido en la Cárcel de Sierra Chica, provincia de Buenos Aires.
Claudia Alejandra Sobrero (24 de octubre de 1962) a sus 21 años, con ayuda de dos cómplices, robó y asesinó en 1984 al conocido dibujante Lino Palacio, creador del personaje de historieta Don Fulgencio, y a su esposa. Sobrero era pareja del nieto del caricaturista al momento del doble homicidio.
Hasta el martes 2 de julio de 2018 fue -cuando se condenó a misma pena a Nahir Galarza por el asesinato de su novio- la única mujer sentenciada a la máxima pena contemplada en el Código Penal Argentino, reclusión perpetua por tiempo indeterminado. Estuvo encarcelada 21 años, hasta que obtuvo la libertad condicional en 2006.
Su libertad duró un año. El 22 de enero del año siguiente, Sobrero fue detenida después de un robo callejero junto con su pareja de ese momento. En 2012 fue liberada nuevamente luego de estar 27 años presa lo que la convierte en la mujer que más tiempo estuvo encarcelada en Argentina.
Similar a las reiterativas matanzas en las escuela de Estados Unidos, la mañana del martes 28 de septiembre de 2004 en la Escuela de Enseñanza Media Nº 202 "Islas Malvinas" de Carmen de Patagones, un alumno de 15 años llamado Rafael Solich, conocido como "Junior", disparó una pistola Browning calibre 9 mm (perteneciente a su padre, suboficial de la Prefectura Naval Argentina) sobre sus compañeros en el aula en la que compartían el primer año de la escuela de educación secundaria.
Como saldo de la balacera fallecieron tres compañeros de aula, de entre 15 y 16 años, y hubo otros cinco heridos. La tragedia fue la primera masacre escolar registrada en América Latina.