Un ex oficial de la Policía Bonaerense podría ser condenado hoy, cuando se conozca el veredicto por un caso de gatillo fácil, al término de un tercer juicio por este episodio, ocurrido en noviembre de 2003, durante un procedimiento concretado en la villa Itatí de Bernal, donde balearon al chico Víctor Elías Balza, provocándole graves heridas que derivaron en su muerte, en momentos en que estaba alojado en la comisaría 2da. de Quilmes.
Se trata de Norberto Darío Javier González, de 36 años, quien fuera exonerado de la fuerza pero nunca estuvo preso.Este ex policía está acusado del delito de "homicidio calificado por el abuso de armas" y luego del debate, tanto la fiscalía como la querella, solicitaron la aplicación de penas de cumplimiento efectivo, mientras el defensor oficial (luego de la renuncia de su abogado particular) se inclinó por la absolución o una condena subsidiario por "lesiones".
Tras una primera postergación y un segundo juicio que fue declarado nulo por la Cámara de Casación (al recibir la apelación del imputado, que había sido sentenciado a 11 años de cárcel), el Tribunal Oral criminal Nro. 5 de Quilmes desarrolló el debate y este mediodía, a las 13, pronunciará el fallo de este paradigmático caso de violencia institucional, tras casi 12 años de demora.
En su alegato, el fiscal de juicio Fernando Celesia solicitó la pena de 12 años de cárcel para el ex policía Norberto González y el abogado Ricardo Milio, en representación de Nora Torres (la madre de Víctor Balza, constituida como particular damnificado) pidió una condena de 22 años de prisión.
Por su parte, el defensor oficial Manuel Soler se pronunció por la absolución o en forma subsidiaria, que se aplique una pena por "lesiones" y no por el homicidio, luego de reemplazar al letrado Gustavo Julio, que pretendía una nueva recusación de los magistrados intervinientes, tal como ocurrió en la primera instancia.
Luego de una larga lucha, algunas veces en soledad y otras acompañada por otros familiares de víctimas, Nora Torres confía en que "de una vez por todas, se haga justicia. González le dijo al Tribunal que quiere que termine todo esto, porque está cansado y qué que para mi, a quien me arruinó la vida, matándome a mi hijo".
"En este tercer juicio, volvió a quedar en claro que ejecutó a Víctor, quien estaba indefenso y no llevaba armas", agregó.Nora Torres cuenta las horas para que se conozca el veredicto y agradeció "el apoyo que me han brindado Alberto Linares del Centro de Protección de los derechos de las Víctimas, de los padres salesianos de Don Bosco, donde mi hijo colaboraba en el comedor comunitario del barrio, a la asociación Madres del Dolor, a Eugenia Vásquez y la gente del Programa Nacional Anti Impunidad, a Carla Lacorte del Centro de Protección de los derechos Humanos y a todos los que estuvieron a mi lado en los momentos difíciles".
Cabe recordar que el 8 de noviembre del año 2003. durante una razzia, concretada por efectivos del entonces Subcomando de Patrullas de Don Bosco en la presunta búsqueda de un delincuente, Víctor Elías Balza (de 18 años) fue detenido, cuando estaba junto a un amigo, en la puerta de una vivienda de la villa Itatí.
En esas circunstancias, fue baleado y alojado en la comisaría de Bernal, durante un irregular procedimiento. Las heridas recibidas, más una deficiente atención, derivaron en su fallecimiento y luego de muchas dilaciones en la investigación, las pericias demostraron que el proyectil partió del arma reglamentaria del oficial González.
Tres años más tarde, cuando el Tribunal Oral Criminal Nro 1: de Quilmes desarrollaba las audiencias preliminares, la defensa del acusado logró la suspensión del juicio, al recusar a uno de los jueces.
Tuvo que pasar otro tiempo prolongado, para el nuevo debate, esta vez a cargo del Tribunal Oral Criminal Nro. 4, que condenó al ex policía a 11 años de prisión, al hallarlo culpable del homicidio pero, tras una apelación, la Cámara de Casación Penal bonaerense se tomó otros dos años para decir la nulidad de todo lo actuado, ordenando este nuevo y tercer juicio.