Alejandro Gastón Radetic, uno de los acusados de participar en una picada a más de 240 kilómetros por hora por el centro de la Ciudad de Buenos Aires en abril pasado, quedó en libertad al acceder a un juicio abreviado en el que recibió una condena a un año de prisión en suspenso, dos años de inhabilitación para conducir automóviles y el decomiso de su camioneta Porsche Cayenne.
Mientras tanto, Francisco Oneto, abogado defensor de Alejandro Biscardi, el imputado que sigue prófugo, presentó dos escritos ante el juzgado que lleva adelante la causa -el Penal, Contravencional y de Faltas No. 10- en los que solicitó que se “omita dictar la rebeldía ya que aún no se cumplió con la garantía de la doble instancia” y, por otro lado, la recusación del fiscal y de todo lo actuado en la causa.
Rodolfo Baqué, abogado de Radetic, señaló respecto de su defendido: “Él reconoció que era uno de los que corría la picada en el video y está arrepentido de lo que hizo”, expresó, y explicó que se llegó a un acuerdo con el fiscal Gonzalo Viña, del Ministerio Público Fiscal, para ir a un juicio abreviado.
“Accedió que su camioneta fuera vendida, que el dinero se destine al comedor Los Piletones y a cumplir con un año de prisión en suspenso y dos años de inhabilitación para conducir”, dijo Baqué en declaraciones a medios periodísticos.
El acuerdo entre la defensa y la Fiscalía está en suspenso, a la espera de la homologación del juez Pablo Casas, magistrado a cargo de la causa.
Como parte de su enmienda, Radetic también ofreció hacer 50 horas de tareas comunitarias y tomar un curso de reeducación vial que dicta la agencia de Seguridad Vial.
Respecto de las armas encontradas en su domicilio, Baqué remarcó que se trataban de “réplicas que él usa en sus videos de cantante de reggaeton”, mientras que las armas reales “estaban debidamente documentadas”.
Mientras tanto, la investigación continúa con la búsqueda del paradero de Biscardi, al margen de las presentaciones ejercidas por el abogado Oneto.