Tras una jornada cargada de debates y discusiones, la sesión de la Cámara de Diputados fue levantada de manera abrupta.
En su turno, la diputada oficialista Elisa Carrió argumentó en favor de la creación de los bancos de alimentos y afirmó que existe "un progresismo estúpido que quiere que la gente vaya a buscar comida a las bolsas de basura" en lugar de "aceptar que las empresas donen primeras marcas".
La ganadora de la últimas elecciones porteñas cerró con un "dejenme de jorobar" y se levantó de su asiento.
Mientras que el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, daba la palabra a otro edil se empezaron a escuchar discusiones alejadas que eran tomadas por los micrófonos que aún quedaban abiertos.
Tras un griterío propio de un estadio de fútbol, el diputado de Libres del Sur Federico Masso denunció que luego de su exposición Carrió se le acercó y les dijo estúpidos a él, a Victoria Donda y a Graciela Cousinet.
"No podemos permitir que una diputada porque crea que es la mejor, que es omnipotente, venga a tratar de estúpido a un colega, eso señor presidente no puede existir en un parlamento", expresó el edil tucumano.
Luego solicitó que la Cámara dispusiera una sanción para la diputada Carrió argumentando "a línea que divide cualquier pertenencia política es la línea del respeto".
Cuando nuevamente la palabra volvió al presidente de la Cámara, este decidió levantar la sesión argumentando que "el contexto" no era acorde para continuarla.
Finalmente, en su Twitter, escribió:
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