El escándalo en el INCAA sigue aun en Semana Santa, pero en medio del apoyo que recibió el ahora ex titular del organismo, Alejandro Cacetta, de parte de la comunidad cinematográfica local, el Gobierno salió a poner paños fríos separando al hombre señalado de los hechos: las denuncias de corrupción.
Este jueves, diferentes miembros de la Academia de Cine y Artes Cinematográficas y otras 11 entidades dedicadas al séptimo arte salieron a respaldar a Cacetta a través de un comunicado.
“El pedido de renuncia resulta sorpresivo y supone un cambio en el concepto de institucionalidad y transparencia que, desde el Ministerio de Cultura, se impuso oportunamente al momento de elegir a las autoridades del Incaa”, sostiene el documento en uno de sus párrafos.
Sin embargo, este viernes, el ministro de Cultura, Pablo Avelluto, marcó un bajó los decibeles cuando desligó a Cacetta de los presuntos hechos de corrupción denunciados en el organismo, aunque manifestó que le “hubiera gustado una actitud más decidida” de su parte en la lucha contra los “kioskos, kioskitos, maxikioskos y polirrubros” que denunció que existen en el ente artístico.
“A veces se piensa que llegar a la función pública es un viaje de boy scout en el que se van a hacer las reformas sin resistencia. Pero hay resistencia, hay kioskos, kioskitos, maxikioskos y polirrubros que vienen pasando no por Alejandro Cacetta, sino que vienen de años”, sostuvo el funcionario nacional.
Asimismo, el ministro recalcó que todas las denuncias por presuntas irregularidades en el uso de fondos públicos reveladas en el ciclo de TV “Animales Sueltos” apuntan a funcionarios por “debajo de Cacetta”, pero le criticó su accionar frente a esas situaciones. “Me hubiera gustado una actitud más decidida de parte de Alejandro, pero esto no lo mancha. Ha hecho cosas importantes, pero nuestra obligación es cuidar la plata de la gente”, indicó el ex coordinador de medios de la Ciudad, que agregó: “Me senté con él y le pedí que accione, como no me satisfizo, le pedí que haga un paso al costado”.
Avelluto especificó que le pidió a la Oficina Anticorrupción que dirige Laura Alonso que “diseñe un plan de transparencia lo más avanzado y profundo posible para el INCAA”, ya que remarcó que “tiene que ser una institución ejemplar y transparente” y no “opaca”; y que le ordenó al nuevo presidente de la institución, Ralph Haiek, “ir a fondo con todas estas situaciones” para saber “a dónde va hasta el último centavo de ese presupuesto de 2.800 millones de pesos”.
Otro de los funcionarios que se refirieron a la actual situación del INCAA fue el titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, que comparó a la institución con “una bolsa de lodo que se abre permanentemente”, en relación metafórica con las “capas geológicas que se enquistan en el Estado mediante los nombramientos de cargos políticos”.
“Hace muchos años que desde el INCAA hay noticias claras de fuertes bolsones de corrupción, sobre todo en los últimos 15 años. Yo creo que hay unos cuantos ex titulares denunciados penalmente. Es como una bolsa de lodo que se reabre permanentemente (…) y la lucha es contra las capas geológicas que se enquistan en el Estado mediante los nombramientos de cargos políticos”, dijo en una entrevista televisada en el canal TN.
“Hay que entender que el Estado es muy bueno pero también tiene taras, y una de ellas son las capas geológicas”, agregó Lombardi.
Asimismo, el funcionario, que dijo que no tiene elementos para poner en duda la honorabilidad de Alejandro Cacetta, dijo que “es muy difícil ponerle el cascabel al gato, porque las personas que se desempeñan por años buscan argucias legales para quedarse”
comentar