El triunvirato se reunirá el viernes temprano con Jorge Triaca y Marcos Peña. Pedirán apoyo oficial para el pago de un bono de fin de año que compense la pérdida del poder adquisitivo del salario a causa de la inflación.

El gobierno recibirá el viernes por la mañana en Casa Rosada al flamante triunvirato que conduce la CGT, compuesto por Héctor Daer, Carlos Acuña y Juan Carlos Schmid, para discutir, a través de una mesa de diálogo, el anteproyecto que modifica las escalas del Impuestos a las Ganancias al tiempo que los dirigentes gremiales pedirán apoyo oficial para el pago de un bono de fin de año que compense la pérdida del poder adquisitivo del salario a causa de la inflación.

El cónclave se llevará cabo el mismo día que las dos CTA (Central de los Trabajadores Argentinos) junto con movimientos sociales culminen en Plaza de Mayo la "Marcha Federal contra el tarifazo, los despidos y el ajuste", que iniciaron la semana pasada desde distintos puntos del país (intenta replicar la histórica marcha federal de inicios de los años '90).

Tal vez por ello en las últimas horas se adelantó el horario en el que el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, recibirá en Casa de Gobierno a un grupo de ocho sindicalistas, encabezados por la cúpula de la central de calle Azopardo, que finalmente fueron citados a las 9 para tratar temas como inflación, ley de empleo joven y la demorada reforma al "impuesto al trabajo".

Un dirigente con muchos años al frente de su gremio adelantó a este diario que "vamos a plantear soluciones para los desocupados, la reforma en las escalas de Ganancias, en síntesis, sabemos de las dificultades pero hay que tratar de mejorar el poder adquisitivo de los salarios para que al menos se puedan recuperar algunos puntos" frente a una inflación acumulada, que se estima, trepará este año al 41%.

En este sentido, el gremialista, que prefirió el anonimato, no descartó que pueda acordarse un bono de fin de año para los trabajadores. Y, frente a la Marcha Resistencia que realizó el kirchnerismo el último viernes, "y cierto activismo de movimientos sociales hay preocupación por lo que pueda pasar a fin de año", al referirse a la posibilidad que se concreten en el área metropolitana incidentes tales como saqueos.

Asimismo, se mostró optimista en la "mesa de diálogo" de mañana. "Como ocurre en este tipo de reuniones, habrá algún dirigente que levantará la voz con algún reclamo, otro se mostrará más conciliadora. Pero no veo ahora ánimo de tomar alguna medida (de fuerza), no ayuda con la situación difícil que se vive a nivel global. Lo del otro día (la Marcha de la Resistencia) se vio que no suma y no ha tenido consenso entre la gente".

Se estima que hoy Triaca estará acompañado por el ministro de Producción, Francisco Cabrera y por el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana. No se descarta que Marcos Peña se sume al encuentro.

Lo cierto es que en el gobierno intentarán contrarrestar los reclamos de la central obrera con argumentos tales como la declamada baja en la inflación, ya que esperan, con optimismo, que el IPC de agosto se ubique en torno al 1 por ciento.

Al pedido de muchos gremios para reabrir paritarias -una lucha que hoy protagonizan los docentes-, se sumara el del pago de un bono de fin de año que, de alguna manera, atenúe la caída del salario real de los trabajadores en 2016.


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Prat-Gay, ausente

El único ministro ausente de los convocados será el de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, quien estará en la ciudad china de Hangzhou en el marco de la Cumbre del G-20 a la que también asistirá el presidente Mauricio Macri.

Al igual que en los anteriores encuentros con el gremialismo, en el Gobierno aseguran que tienen "las mismas inquietudes y objetivos" y resaltan el "diálogo y buen trato" entre ambas partes.

Mientras tanto, en las calles otro sector del sindicalismo, encabezado por Pablo Micheli y Hugo Yasky, las dos CTA y otros sectores encabezarán la "Marcha Federal" para pedirle al jefe de Estado que declare la "emergencia laboral".

Al respecto, el secretario general de la CTA de los Argentinos consideró que recibir al triunvirato de la CGT unificada el mismo día en que se realice la movilización "es una mala jugada" del Gobierno.


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