Quilmeño
Estaban detenidos por “Tentativa de Homicidio”, pero en menos de una semana recuperaron la libertad. Enardecidos por la decisión de la Justicia, cerca de 100 personas intentaron linchar a los agresores y prendieron fuego su vivienda de Florencio Varela.
Alrededor de un centenar de vecinos de Florencio Varela decidieron hacer justicia por mano propia y prendieron fuego la vivienda de un matrimonio, al cual dejaron en libertad tras haber sido detenidos por torturar a sus pequeños hijos de 1, 3 y 4 años, a quienes maniataban, golpeaban y quemaban con cigarrillos.
Tras la denuncia de la Asociación Civil 'Inseguridad Cero = Exclusión Cero', efectivos policiales de la Comisaría 4ª de Bosques habían realizado un operativo en una casilla ubicada en la calle El Chocón, entre San Gerónimo y 1° de Mayo, del barrio San Rudecindo, donde rescataron a tres pequeños que tenían en sus cuerpos profundas marcas de violencia y, además, se encontraban en un visible estado de desnutrición y enfermos de sarna.
Los padres de los menores, una mujer de 23 años y un hombre de 40, quedaron detenidos por el delito de 'Tentativa de Homicidio'. Sin embargo, una semana después de su detención, los agresores recuperaron la libertad por orden del juez Julián Busteros, titular del Juzgado de Garantías Nº 5 de Florencio Varela.
Cuando regresaron al vecindario, los vecinos no toleraron la presencia de los padres golpeadores y protagonizaron una pueblada. Primero intentaron linchar a los acusados, pero efectivos de la Comisaría 4ta. de Bosques lograron rescatarlos y ponerlos bajo custodia.
Lo que no pudieron conseguir fue detener la furia de los manifestantes, que se ensañaron con la vivienda de la pareja y la prendieron fuego. También se generaron enfrentamientos con la policía y dos vecinos fueron detenidos, entre ellos una mujer que se comprobó más tarde pertenecía a la Policía Local Quilmes, por lo que se dispuso que fuera desafectada de la fuerza.
No pueden regresa r
En tanto, se supo que el matrimonio acusado de violencia se tuvo que mudar a la vivienda de un familiar en la localidad de Ezeiza, mientras que los tres menores de edad continúan bajo la custodia de uno de sus abuelos y se recuperan de las heridas y enfermedades que presentaban.
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