Se trata de la calle Esquel al 1300, en el partido de Quilmes, donde los residuos generan un verdadero peligro para la salud de los habitantes de la zona, sobre todo de los más chicos, cuyas defensas no están bien desarrolladas.
El problema viene traumatizando a los frentistas desde hace diez días y no saben qué hacer; además, aseguraron que
no recibieron respuesta alguna por parte de la Municipalidad de Quilmes.
Al respecto, Yamila, vecina del lugar, expresó que el principal motivo del basural es la apertura de las bolsas de basura por parte de las personas que andan "en los carritos", pero sobre todo de "los perros de la zona".
"Es una mugre, acá viven chicos, ancianos. Esquel entre el arroyo Giménez y Monroe se encuentra tapada de basura", indicó Yamila; también, mencionó que existe la presencia de "palomas, perros y ratas de gran tamaño. Es una
asquerosidad".
Por otro lado, otra frentista, Florencia, aportó un llamativo detalle y es que "las ratas tienen el tamaño de un
gato. Ellas se pelean con los perros", e igual que Yamila utilizó la palabra "asquerosidad" para describir esta espantosa y peligrosa situación.
Asimismo, resaltó que "hace nueve días que estamos así, ni siquiera la comisión del barrio vino a ver qué pasa. Esto es muy peligroso para las personas mayores y los más chicos".
También, cabe destacar que los contenedores puestos por la Municipalidad de Quilmes se encuentran
abarrotados de residuos que imposibilitan el ingreso de los desechos de las familias. Para evitar semejante problema los frentistas señalaron que para no acumular en la calle decidieron juntar las bolsas de consorcio dentro de su propiedad.
Por último, expresaron que no es la primera vez que sucede este problema. "Por eso llamamos a los medios, para que de una vez por todas nos
escuchen, y se den cuenta de nuestro problema. Es imposible vivir asì, invadidos por la basura", subrayó Florencia.