Quilmes y Berazategui, entre otros diez municipios bonaerenses, han sido inspeccionados por el Ministerio de Producción de la provincia de Buenos Aires que denunció que en el 70 por ciento de los locales el precio de la garrafa es superior a los 16 pesos establecidos por el gobierno nacional para el envase de diez kilos. Tras un relevamiento realizado por el organismo provincial en una docena de municipios, entre los que se encuentran los de la región, los funcionarios han detectado que en el 70% de los comercios controlados, el precio de la garrafa de diez kilos es superior a los 16 pesos -llega en algunos casos a 40- o no se exhiben los valores como está establecido por ley. A pesar de la información oficial, en Quilmes aseguran que no hubo denuncias al respecto y pidieron a los vecinos que hagan saber sobre los sobreprecios. En Quilmes y Berazategui se visitaron 11 comercios, de los cuales 8 (73%) fue infraccionado por no respetar el precio acordado en las garrafas. Otros 7 establecimientos fueron inspeccionados en Avellaneda, donde se encontró que el 71% cobraba valores diferentes a lo establecido. En el caso de Lanús donde se inspeccionaron 6 comercios, el 67% no cobraba los precios establecidos y el 17% no exhibía los valores de las garrafas. Todos ellos fueron infraccionados. Además de los dos partidos de la región, los inspectores de la cartera productiva recorrieron comercios de Tandil, General Pueyrredón, Bahía Blanca, Punta Alta, Olavarría, General Alvarado, Azul, Pinamar y Villa Gesell. En total, 92 comercios de los cuales el 60.86 por ciento no respetaban las reglamentaciones vigentes; el 46,73 por ciento no respetaba los valores establecidos por la Secretaría de Energía de la Nación; y el 14.13 por ciento no exhibía los precios de las garrafas. El Anexo IV de la Resolución 1071/08 de la Secretaría de Energía de la Nación establece los precios máximos en los que deben venderse las garrafas. Así la de 10 kilogramos cuesta 16 pesos finales; la de 12 kilogramos, 20 pesos y la de 15 kilogramos, 25 pesos. Sin embargo, se ha detectado que las garrafas más chicas se están vendiendo desde 25 a 40 pesos. A raíz de esta situación, el gobierno inició operativos de control en distintos puntos de la provincia. Ante cualquier situación anómala, los consumidores pueden realizar las consultas y reclamos a la línea gratuita de Defensa del Consumidor de la Provincia 0800-222-9042 (de 9 a 18) o a las distintas Oficinas de Información al Consumidor que funcionan en 90 Municipios. El ministro de la Producción bonaerense, Martín Ferré, explicó que “los operativos de control de los precios de las garrafas es un trabajo en equipo, y junto con el Gobierno Nacional, a través de la Secretaría de Energía, trabajamos para detectar los casos donde se pueden estar cometiendo abusos”.

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