Un vecino de Bernal atacó con trompadas y gas pimienta a personal policial, que se había acercado a su domicilio para entregarle una notificación sobre una denuncia civil, y luego permaneció por más de dos horas, dentro de su hogar, atrincherado y efectuando disparos, hasta que finalmente se entregó y quedó detenido. El hecho provocó momentos de profunda tensión en el barrio, ya que se desconocía hasta dónde pensaba llegar con sus maniobras de resistencia.
La reacción del hombre, de unos 44 años, sorprendió al personal de la Comisaría Segunda y provocó gran conmoción en el barrio que quedó perplejo ante una nueva reacción desafortunada por parte del hombre que, según aseguraron residentes de la zona, padecería de alteraciones psiquiátricas.
Según se indicó, todo comenzó pasadas las 16 del martes, en una vivienda de dos pisos ubicada en la esquina de 9 de Julio y Comodoro Rivadavia, de Bernal Oeste. Hasta allí se dirigió personal de la seccional Segunda de Bernal para hacerle entrega a su morador de una cédula de notificación debido a una denuncia presentada por los vecinos, por pozos que al parecer el hombre había hecho en el pavimento.
De acuerdo a lo señalado por los policías, el hombre que ronda los 44 años, les respondió con gas pimienta y puñetazos a los uniformados y más tarde se atrincheró en su domicilio, tomó un arma de fuego y efectuó varios disparos intimidatorios.
En tanto, la fuerza policial pidió refuerzos y procedió a cortar calles y liberar el radio comprendido entre las calles Rivadavia, desde Avellaneda hasta Zapiola, y 9 de Julio, desde Viejobueno hasta Levalle.
A los pocos minutos, se hicieron presentes en el lugar el titular de la Departamental, comisario mayor Pablo Otero; el titular de la Distrital, comisario inspector Fernando Grasso y el comisario Alejandro Centurión -a cargo de la seccional 2ª-.
“Recibimos el alerta que un hombre había comenzado a disparar y había atacado a personal que le había acercado la notificación a su domicilio. Les arrojo gas pimienta a los ojos y algunos golpes, por lo que el personal tuvo que ser atendido”, indicó Otero.
Tras los primeros ataques, el hombre se atrincheró dentro de su casa y según los vecinos ejecutó una docena de disparos. La preocupación y el temor se habían apoderado de varios frentistas que indicaron haber denunciado en varias oportunidades al individuo por violento.
Además de las autoridades policiales, arribó al lugar el GAD (Grupo de Apoyo Departamental) a cargo del comisario Roberto Mongelos y luego llegó el titular de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 3, doctor Andrés Federico Nieva Woodgate, del Departamento Judicial Quilmes.
Fue entonces cuando se inició el diálogo entre el hombre armado y las autoridades policiales y judiciales.
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